Este lunes por la tarde coincidieron en el mismo espacio y a la misma hora, dos personas que no pueden estar más alejadas la una de la otra. Quizás compartieron pasillos en TV3, pero nada más. En el programa Tot es mou, uno de los tertulianos de ayer fue, como a menudo, Jordi Cañas.
El exdiputado de Ciudadanos en el Parlament, cuando salió, quizás se cruzó en la puerta giratoria de la entrada con Toni Soler, que tomaba el relevo de Helena Garcia Melero ante los espectadores para empezar el primer 'Està passant' post Òscar Andreu. El director y presentador del programa satírico de TV3 'llegó tarde' a su silla porque le había tocado pasar un "control aleatorio en el aeropuerto... no todos tenemos la suerte de Albert Rivera".
Después de recordar la noticia en que el líder de Cs provocó unos disturbios con los vigilantes del aeropuerto al saltarse un control aleatorio de material explosivo, Soler se mofa de la situación: "¿¿Por qué se negó?? Yo cuando voy al aeropuerto rezo por que me hagan un control aleatorio, sólo para que alguien me toque gratis!!". Un comentario muy aplaudido por el público de plató. Pero todavía más cuando Soler, dirigiéndose a los guionistas, les dice: "Ya está bien, mira qué bromas me hacéis decir para no hablar del tema de las drogas...":
En este punto, es importante constatar un hecho digno de estudio que se está repitiendo los últimos días: los políticos del partido naranja se irritan sobremanera cada vez que un programa de humor de TV3 hace una parodia o un sketch sobre las cosas que ellos consideran "sagradas". Tanto da que muchos políticos de su cuerda, o muchos comunicadores de los medios estatales, las digan de padre y muy señor mío hablando de Catalunya. Y no nos referimos a programas de humor, sino en programas "serios" o en el Congreso de los Diputados. Para ellos, no se puede hacer según qué humor sin que salten como un muelle a la yugular, en este caso, la de Toni Soler. Ya pasó la semana pasada cuando la misma Inés Arrimadas se sulfuró por un gag del 'Polonia' que ironizaba sobre los estereotipos de familias ultranacionalistas.
Ahora quien no se ha mordido la lengua ha sido quien fue su compañero en la bancada parlamentaria. Un Jordi Cañas que ha explotado después de que Soler "haya osado" poner en una misma frase a su líder espiritual y a la palabra "drogas".
No ha sido el único que le ha insultado. También lo ha hecho el expresidente de Societat Civil Catalana, Josep Ramon Bosch, que le ha llamado "sinvergüenza y millonario de TV3 presentando a Albert Rivera como a un drogadicto. Sí, en la televisión pública que pagamos todos":
No es la primera vez que Cañas se las tiene con Soler y se molesta por comentarios suyos. Cuando el presentador dijo "Si fuera por Ciutadans, Catalunya sería Murcia", Cañas escribió: "Si fuera por ti, sería Kosovo". Desde aquí pedimos una cámara en la sala de maquillaje de TV3. Especialmente, para ver qué se dicen Cañas y Soler cuando uno se desmaquilla después de su programa y el otro está a punto de entrar al suyo.