Ya es un clásico de estas fechas, tanto como el discurso de Nochebuena del rey Felipe, el vestido que se pondrá la Pedroche para dar las campanadas de Fin de Año o el 'Nadal a tres bandes' de billar en TV3. Hablamos de Masterchef Junior, la versión con niños y niñas del popular y veterano talent culinario de TVE, que este año ha vuelto a la parrilla televisiva por undécima vez. Son días donde los más menudos de la casa no van ni a la escuela ni al instituto, son días, por lo tanto, que no pasa nada si se quedan despiertos más tarde de la cuenta y se van a dormir un poco más tarde que de costumbre. Y este jueves 26 de diciembre, por Sant Esteve, no les vimos hacer canelones, pero sí cocinar otros platos en el primer programa de una nueva edición del programa destinada a los más pequeños. Y este viernes, segunda entrega:

Como ven, en Masterchef Junior a menudo vemos a los tres miembros del jurado disfrazados de diferentes personajes, haciendo las delicias de los jóvenes concursantes. Para el pistoletazo de salida, Samantha Vallejo-Nájera, Pepe Rodríguez y Jordi Cruz escogieron a tres personajes del mago de Oz, la niña Dorothy, el león sin valor y el hombre de hojalata sin corazón. Pero nada más lejos de la realidad con respecto al chef catalán. Porque por mucho que a menudo tenga un ademán de hombre duro, sin sentimientos, implacable y severo, especialmente con los concursantes anónimos mayores de edad, lo único que hay a ciencia cierta es que es exigente y quiere que los concursantes saquen lo mejor de ellos mismos. Pero si alguien se cree que Jordi no piensa en los otros, va bien errado, como lo volverá a demostrar este lunes 30 de diciembre.

Para acabar el año como se merece ha decidido participar en un último acto solidario de los muchos en que participa. Será la ocasión de verlo en un contexto poco habitual. Su hábitat natural, donde se encuentra como pez en el agua, es entre fogones, ya sea en el plató de Masterchef o en su restaurante. Pero ahora lo veremos directamente con el agua al cuello, por una buena causa. Y es que el chef manresano participará de una iniciativa emocionante de cara a los que más lo necesitan. El Aquàrium de Barcelona y el cocinero catalán, unidos por una buena causa, abrirán los actos del 30.º aniversario de la entidad barcelonesa dando 5.000 euros a una entidad sin ánimo de lucro que trabaja en beneficio de causas sociales o medioambientales. ¿Cómo? Con una tradición: sumergirse en el Oceanario con tiburones y más de 80 especies diferentes de seres marinos, el lunes 30 por la mañana. El tradicional 'Baño solidario' de L'Aquàrium de Barcelona, como ya han hecho en el pasado personas como la actriz Sílvia Abril, los chefs hermanos Torres, el tenista Pablo Carreño o el cantante y presentador Miki Núñez.

El centro marino y el cocinero desearán lo mejor para el 2025 en un gesto conmovedor, que impresiona, combinando espectáculo y compromiso, con los tiburones a tocar. Una remojada que sin duda no olvidará nunca el bueno de Jordi.