El domingo 5 de mayo será la última vez que veremos a Jordi Évole presentando Salvados. Lo anunció emocionado y en exclusiva a Pablo Motos durante su visita a El Hormiguero, dejando al mundillo audiovisual estupefacto por lo inesperado de la noticia. Hace sólo una semana que conocíamos la renovación del acuerdo de larga duración entre Évole y Atresmedia, y todo el mundo daba por hecho que eso comportaría la continuidad del programa. Lo que nadie se imaginaba, sin embargo, es que sería sin su líder al frente. Ni siquiera después de leer y escuchar sus avisos antes de empezar la entrevista, a través de un tuit y en su primera intervención, ya en el plató de Motos: "Esta no va a ser una noche cualquiera". No mentía.
Évole cierra así una etapa de once años al frente de un espacio que se ha convertido en referencia informativa. 273 programas que han dado mucho de sí, desde el primer Salvados por la Campaña hasta el último y controvertido debate entre Ada Colau y Manuel Valls. Un currículum en el que encontramos entrevistas históricas con Nicolás Maduro o el Papa Francisco (la primera persona que conoció la decisión del presentador), capítulos dedicados a las cloacas del estado con José Manuel Villarejo, los olvidados del accidente del Metro de Valencia, la trata de mujeres o la corrupción, etcétera, sin olvidar la situación política en Catalunya, con polémicos debates entre Mònica Terribas, Lídia Heredia, Josep Cuní, Antonio García Ferreras y Vicent Vallès, por poner un ejemplo. "Hace tiempo que le vengo dando vueltas, y la entrevista al Papa fue como la gotita que colmó el vaso, vi muy claro que se había cerrado el círculo", aseguraba ante la audiencia de El Hormiguero.
El anuncio, como es natural, ha sido uno de los temas más comentados en las redes. La diversidad de opiniones y sensibilidades hacia la figura del presentador ha sido, una vez más, la tónica general. Muchos ya hablan con nostalgia y agradecimiento por estos 11 años en antena, pero también los que se alegran de su marcha y le dedican palabras poco amables.
Évole se va de Salvados, sí, pero ni mucho menos de la tele. De hecho, la decisión está ligada al nuevo reto profesional del de Cornellà del Llobregat, que prepara un espacio de entrevistas en prime time y en la misma cadena: "Me voy a intentar reinventar". Su marcha, sin embargo, no significa el desmantelamiento del equipo que le ha acompañado durante esta etapa. Todo lo contrario. De hecho, ya tiene a punto a su sustituto: "Va a ser otro presentador que hará que no me echéis de menos", pero quiere que sea esta persona la que lo comunique oficialmente, aunque "no sé si podremos mantener mucho tiempo el secreto". Las redes ya hacen su porra, con un nombre destacado entre las preferencias de los internautas: Fernando González, Gonzo, reportero de El Intermedio.