Después de once años al frente de Salvados, Jordi Évole se marcha y cierra una etapa. El presentador catalán emitió anoche el último reportaje del programa que lo ha encumbrado como uno de los referentes del periodismo de denuncia social. Para despedirse de la audiencia, el de Cornellà preparó un último Salvados muy emotivo que fue también un homenaje a su barrio, Sant Ildefons.
Jordi Évole hizo protagonistas del programa a los vecinos del barrio donde creció, para que explicaran cómo ha cambiado la vida en Cornellà durante las últimas décadas. Pero sin duda, el mejor testigo del paso del tiempo en Sant Ildefons son las imágenes de un documental que el padre del presentador grabó en el año 1981, cuando Jordi tenía tan sólo 9 años, y que Salvados emitió ayer, mostrando cómo era el director del programa de pequeño.
El programa de La Sexta ha hecho historia estos años con entrevistas inéditas en España, como las que hizo con Nicolás Maduro o el Papa Francisco, además de un montón de reportajes sobre la situación política en Catalunya que han contado con personalidades relevantes del procés, como Carles Puigdemont, Oriol Junqueras o Artur Mas.
Salvados empieza a partir de ahora una nueva etapa. El periodista gallego Gonzo, que hasta ahora ha formado parte del equipo del Gran Wyoming en El Intermedio, tomará el relevo a Évole, que ayer dijo adiós a su audiencia con un 12,2% de cuota de pantalla en Catalunya y un 12,1% en España, por debajo del 30 minuts de TV3 y de Supervivientes, respectivamente.