Estuvo un tiempo alejado de las redes sociales pero, desde hace ya varios meses, el presentador catalán de Barcelona, Jordi González, está al pie del cañón y se muestra más activo que nunca en su cuenta de Instagram, donde casi a diario comparte fotografías con sus seguidores.
Fotos como la que ha publicado recientemente a su paso por un conocido y concurrido centro comercial de Madrid, ciudad donde vive durante gran parte del año cuando está presentando programas en Telecinco. Un lugar para hacer compras que no ha gustado al catalán. Todo lo contrario. Tanto, que no ha dudado en dejar constancia de ello en sus redes. Aunque, como dice el refrán, quien tiene boca se equivoca. Y Jordi ha metido la pata hasta el fondo. Desvelamos lo que ha ocurrido, a continuación.
Jordi González es un hombre de mundo. El catalán no solamente vive en Madrid, sino que también tiene casa en Río de Janeiro, en Miami, en Barcelona y siempre que su agenda se lo permite viaja de un lado a otro. Es inquieto, curioso y un gran apasionado por descubrir sitios nuevos. Motivo por el que el presentador, con sus ojos, a lo largo de su vida, ha visto un sinfín de cosas, de todas las formas, gustos y colores.
Aunque, si hay algo que hasta día de hoy no había visto y le ha sorprendido para mal, muy mal, ha sido un centro comercial de Madrid, concretamente ubicado en el municipio de Majadahonda. "Me han llevado al centro comercial más feo de cuantos he visto en mi vida, feo de verdad. No lo menciono para no perjudicar el trabajo de nadie", escribe, más sincero que nunca, el presentador. Unas palabras que acompaña con una foto suya, en el interior de dicho centro, en la que sale llevándose una mano a la cara en señal de incredulidad, incomodidad y mal gusto. Hablamos de esto:
Una foto, aparentemente, muy normal. Jordi González vestido de negro, con una mascarilla y bandolera del mismo color, mientras se apoya en una de las barandillas de la parte superior del centro. Aunque, si se observa la fotografía con detalle, hay un elemento que salta a la vista y llama muchísimo la atención. Mucho.
Y es que Jordi González, pese a no querer desvelar el nombre del centro comercial que tanto le ha horrorizado, no ha sabido calcular bien las distancias a la hora de hacerse la foto y en uno de los aparadores aparece con letras mayúsculas el nombre completo de dicho centro comercial. La prueba:
"Parece un sito ruso, eso es verdad", "Me recuerda a Las Vegas, aunque Las Vegas tiene encanto", "Es horrible", "Ten cuidado que hay otro igual en Barcelona" o "Feo de cojones" son algunos de los comentarios que sus seguidores, más de 184.000, le han hecho llegar. Aunque la gran pregunta es: ¿ha metido la pata Jordi González involuntariamente o intencionadamente?
Sea como fuere, seguro que el centro comercial agradece al presentador la publicidad que les ha hecho porque casi seguro que alguien irá al sitio, solamente para comprobar si realmente es tan feo como Jordi González dice que es. Brillante.