Jordi González es una bestia televisiva, y quizás ha hecho una bestialidad. Hace sólo 3 meses sufría un desprendimiento de retina que anunciaba con foto a su amiga Pilar Eyre y se hacía eco En Blau. Ahora Telecinco ha decidido sustituir a Sandra Barneda por el periodista catalán al frente de GH Dúo: el debate la noche de los domingos, y la imagen de González hace sufrir. Notablemente pálido, su ojo izquierdo se iba volviendo rojo a medida que avanzaba la noche. Un plató lleno de focos potentísimos no es lo más conveniente para una persona que sufre de la visión pero Paolo Vasile no es oftalmólogo. Fíjense en el ojo izquierdo de Jordi:
Es el segundo desprendimiento que sufre Jordi González, uno en cada ojo, a sus 56 años. Pero su contrato con Telecinco es de plena disponibilidad: si la cadena lo convoca a presentar una espanto como Hechos reales en verano o un reality en invierno, abandona Miami, donde reside con su pareja, y cada domingo se presta a dar paso a Belén Esteban o Ares Teixidó. La audiencia lo acompañó, sin ser un éxito abrumador, el primer día: 15,4% en España y 12,7% en Catalunya. Algunos espectadores notaron otra manía de González que lo asocia a Josep Cuní: los platós a baja temperatura, precisamente para contrarrestar el calor de los focos:
Belén Esteban vuelve de publicidad con un abrigo grueso. Volvía de fumar pero le lanza "Tengo frío". Será por las temperaturas, por los problemas de visión o por llevar demasiado tiempo al calor de Miami pero la audiencia percibe que González no está bien:
"Pálido, fumado, desganado, operado, raro, inyectado de bótox...". Los que mejor le conocen tienen la respuesta: se le nota demasiado cuándo una cosa le da pereza. Que vaya con ojo.