Jordi González ya no tiene programa en Telecinco. Los que lo consideran uno de los mejores presentadores han visto cómo se apagaba su estrella con la última edición del Debate de Supervivientes. Parecía que el catalán lo hacía de manera rutinaria. No es su formato predilecto y se nota. Telecinco ha hecho una jugada extraña: el último Debate del reality de la isla no lo ha presentado González sino Sonsoles Ónega, que lo hace peor. La prensa especula con el sospechoso adiós de Jordi González.
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El diario La Razón da por hecho que Telecinco se lo quiere sacar de encima: "Jordi podría ocultar los verdaderos motivos de su marcha amparándose en un estado de cansancio absoluto, una "sobredosis de información". Pero algunas fuentes apuntan a que se sentía relegado en la empresa y que su intención se tomarse vacaciones hasta septiembre para reflexionar, y regresar con un nuevo proyecto televisivo. Lo que crea dudas es si decidirá o no seguir en Mediaset". El uso del verbo "podría" acredita que el diario de Marhuenda se lo podría estar inventando.
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Jordi González se ha explicado a su amiga la periodista Pilar Eyre, con quien compartieron uno de sus mejores programas: La palmera en TVE-Catalunya. Jordi González confiesa que "Volveré en septiembre. Este parón era lo acordado con Telecinco. Yo solo tenía que presentar 'Conexión Honduras' hasta finales de mayo. No me voy de Telecinco, estoy muy contento. Encantado en la cadena". Se da por descontado que volverá en otoño al reality de turno. Los que le siguen en TV saben que en ese formato no puede ser él mismo.
Jordi González ha cerrado sus concurridas redes sociales, eludiendo tanta presión sobre si se ha operado, se ha teñido o ha envejecido mejor o peor. Se mueve entre Miami y Río de Janeiro, donde tiene casas de lujo. Sobre su vida privada, nunca ha revelado nada y su joven acompañante durante años en las redes sociales ya hace tiempo que no aparece. Es el mejor presentador de late nights de Catalunya. Pero en Telecinco no le dejan hacer lo que mejor sabe hacer.