La lengua catalana se apaga. La situación es alarmante en el peor lugar, en la escuela. Según datos de la misma Conselleria de Educación, a pesar del sistema vigente y obligatorio de inmersión lingüística en catalán, sólo el 46% de los maestros se dirigen a sus alumnos en catalán. O dicho de otra manera, la mayoría de profesores hablan en castellano a su clase.

¿Inmersión? Sí, en lengua castellana para el 54% de los niños. Un drama para la lengua minorizada y en riesgo. Desde el otro gran foco de importancia para la lengua, la TV pública, uno de los veteranos de TV3 envía una señal de ánimo: no está todo perdido.

Foto y texto maravillosos en el Instagram del experto en basket Jordi Robirosa:

Jordi Robirosa, TV3

La cuenta de Instagram de Robi es siempre de lectura obligada. Aparecen sus vicisitudes aeroportuarias pero también reflexiones maravillosas como esta escena que se ha encontrado en el bar de la Librería Laie en la calle Pau Claris de Barcelona:

"En la cafetería de la librería Laie hemos visto a esta chica, probablemente japonesa, tomando notas. Al cabo de un rato ha venido otra, de aquí. Y  se han puesto a dar clase... de catalán. Le he dicho a Carina: "lloraría de emoción". Quizás no todo lo tenemos perdido. Lengua catalana. Llibreria Laie, Òmnium Cultural".

Un buen rincón para hacer pareja lingüística: una catalana y una japonesa hablando en catalán para que la persona no catalanohablante aprenda, entienda y se relacione con la lengua de Catalunya. De manera desinteresada, sólo por hacer crecer la lengua y las relaciones personales. Orgullo de país.

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Jordi le ha dicho eso a su mujer, Carina, a quien ya conocemos de otros posts de Instagram.

Robirosa es uno de los veteranos de Deportes, tiene 63 años, es una autoridad del basket, ha cubierto decenas de Final Four, y fue de los pocos a quienes Pau Gasol abrazó en su último partido como jugador del Barça.

Robirosa tiene imitación propia a los programas de Toni Soler como el desaparecido Crackòvia. Mítico su "apostoflant" como sinónimo de delirante.

Este verano fue noticia porque una compañía catalana, Vueling, lo había dejado tirado con su familia en la Terminal sin poder ir de vacaciones aunque tenían los billetes comprados: "overboocking" vender más asientos de los que tiene el avión. Indignante en pleno 2021.

Robirosa se hacía la foto a punto de embarcar a Menorca, a día 4 de agosto. Robirosa explotaba: "Hace más de 40 años que vuelo y puedo decir que ninguna compañía me ha tratado tan mal como Vueling. Aquí me tenéis empezando las vacaciones con la familia con un overbooking. Es escandaloso. Vueling"

Robirosa y su mujer se quedaron en tierra, en el Baix Llobregat y con un palmo de narices. Esta es su señora, Carina:

Instagram de Jordi Robirosa

Deporte y cultura, ligados a un mismo periodista. El bueno de Robirosa.