Rojo por doquier para un plató impresionante de aproximadamente unos mil metros cuadrados. Música oriental a más no poder y colaboradores que auguraban un estreno de esos para el recuerdo. Una gata de peluche gigante, actuaciones musicales y bailes al más puro estilo Kung Fu Panda. Todo a lo grande, se anticipaba una nueva era. En la noche del 11 de septiembre, Telecinco daba el pistoletazo de salida a Cuentos chinos, su nuevo espacio para atacar la franja del 'access prime time'. Nada banal, porque el presentador es el badalonés Jorge Javier Vázquez. Su tan ansiado retorno, por fin efectivo y de la mano de La Fábrica de la Tele, la productora que tantas alegrías le ha dado en los últimos catorce años al mando de Sálvame.
Los comienzos nunca han sido fáciles, aunque el espacio del expresentador de Aquí hay tomate parecía tenerlo todo para ser el más competitivo contra el asentadísimo El Hormiguero. Conductor de renombre, colaboradores de toda índole, secciones por un tubo y muchos palos que tocar. Para algunos, demasiados. Un ritmo frenético y difícil de digerir para los espectadores que, por desgracia, no ha surtido el efecto esperado en cifras.
'Cuentos chinos' no convence a la audiencia
9,4%. El número que todo el mundo quería conocer y que ya es público. La escueta cifra de cuota de pantalla que los cuentos chinos de Vázquez marcaron. 1.240.000 espectadores que distan mucho de los receptores que conseguía el espacio de Pablo Motos y las hormigas Trancas y Barrancas. El Hormiguero llegó al 19,1% con 2.488.000 espectadores, doblando a Jorge. Un fracaso estrepitoso sobre el que el comunicador, haciendo gala de su transparencia, no ha dudado en pronunciarse a través de su cuenta de la red social X. "A ver, ayer pasé lista y lo cierto es que faltasteis cientos. Cientos de miles, quiero decir. Así que corred la voz. A los que estuvisteis, a sus pies. Gracias eternas siempre. Hoy también vuelve a ser hoy. Siempre es hoy", reflexiona.
Las reacciones al descafeinado retorno de Jorge Javier
También en X, antes Twitter, Jorge habrá podido disfrutar de las incontables reacciones que su nuevo reto ha suscitado en los espectadores. No sabemos si las ha leído, pero aquí recogemos algunas de las más desencantadas con un programa que definen "infumable" y hablan en código sobre el tan mencionado "suflé" de Vázquez. Algunos, aun así, tratan de ser constructivos, con consejos del estilo "o las secciones las hacéis más tranquilos, o quitáis las secciones y te dejan a ti haciendo las entrevistas" y "como no cambie el formato del programa, irá de fracaso en fracaso". Bien, quizás tan constructivos no son.
No podemos obviar la otra cara de la moneda. Desde la crítica, pero valorando los esfuerzos del equipo, otros internautas hacen balance. "Es un gran formato. Quizás peco de alocado y rápido. Necesita tiempo para asentarse. El Hormiguero ya es un producto asentado y conocido, por eso triunfa", escribe otro usuario.
Guste más o menos, no hay previsión de que las emisiones de Cuentos chinos cesen. Hoy vuelve, y así hasta el viernes. Veremos si el llamamiento de Jorge Javier a través de las redes tiene algún efecto.