'La commedia è finita'. Esta famosa frase seguro que está en la cabeza de Paolo Vasile, capo de tutti capi de Mediaset, después de oír el enfrentamiento público entre dos de sus piezas más preciadas: Jorge Javier Vázquez y Ana Rosa Quintana. El documental de Rocío Carrasco ha tensado las relaciones entre los programas de Telecinco, especialmente entre el espacio matinal de Quintana y 'Sálvame', programa estrella de la productora 'La Fábrica de la Tele'. La empresa audiovisual del catalán Óscar Cornejo es la autora del polémico formato que recoge al testimonio desgarrador de Rocíito, y el principal altavoz del ensañamiento contra Antonio David Flores y sus hijos. Ana Rosa tiene en nómina a Alessandro Lequio, defensor de la exguardia civil acusado de maltratador, y a Rocío Flores, la hija de la discordia del exmatrimonio. Después de semanas de advertencias y encotronazos sin hacer demasiada sangre, ya podemos decir que la guerra es oficial: la ha declarado el propio Jorge Javier en respuesta al ataque de la presentadora contra su productora, una afrenta que no está dispuesto a dejar pasar.
El estallido definitivo de las hostilidades ha ocurrido a raíz de la entrevista de Antonio Canales en el 'Deluxe'. Un desbarajuste absoluto: el bailaor iba al plató para explicar sus declaraciones sobre Fidel Albiac y Rocío Carrasco, rechazando que fueran amigos en contra de la creencia general. Canales es un 'bienqueda' de manual, y da pena. Ha vuelto a cambiar de versión al llegar a Madrid: si en Honduras y junto a Olga Moreno, mujer de Antonio David, decía una cosa, ahora se ha desdicho para afirmar todo el contrario. ¿Por qué? Porque la pareja es muy celosa de su intimidad, y no quería incomodarlos explicando su estrecha relación desde hace años. La estrategia de Canales es de traca, e hizo reaccionar a Ana Rosa con ironía. "¿Cuándo dice la verdad? ¿Cuándo lo dice en la Palapa, que quiere queda bien con Olga, o cuando lo dice aquí que quiere quedar bien con La Fábrica de la Tele?". La mención a la productora ha hinchado las narices de Vázquez, airado y amenazador: "¿Ana Rosa ha pronunciado 'La Fábrica de la Tele'? ¡Esto ya es la guerra! ¡Qué fuerte!". Los cimientos de Mediaset tiemblan. Y los cuchillos vuelan de trinchera a trinchera.
Jorge Javier no soporta a Ana Rosa, y parece que el sentimiento es recíproco. Rocío Carrasco es la excusa perfecta para acabar con las historias y servir en bandeja a los espectadores el combate definitivo. Hagan sus apuestas.