"Vocalice mejor", le dijo a una presentadora norteamericana que le hacía preguntas en su lengua natal en una entrevista en una TV de los Estados Unidos. "Paren la grabación", exigió en una entrevista para un canal alemán cuando le preguntaron por los presos políticos. Comparó dialogar con Torra con comer niños crudos... Son algunos de los greatest hits de Josep Borrell. Así es y así se comporta quien Europa ha propuesto como jefe de la diplomacia de la UE... Un 'diplomático' de la cabeza a los pies. Los jefes de estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) han tenido la genial idea de pensar en él para ocupar el cargo de alto representante para la Política Exterior comunitaria.
Pedro Sánchez está satisfecho, "es una extraordinaria noticia. Borrell es una persona acreditada, con experiencia, en un puesto vital". No ha sido el único que 'se ha deshecho en elogios' hacia la controvertida figura política. La apuesta por un 'pacificador' que apaga fuegos con gasolina como el aún ministro de Exteriores español en funciones ha sido comentada largo y tendido desde todos los frentes. Algunos de los que se han pronunciado han sido Gonzalo Boye y Toni Soler. El abogado de Puigdemont y Comín ya puede encargar un suministro extra de palomitas para los europeos: "Vendrán grandes días para la diplomacia europea". El presentador del Està passant de TV3 también ha tirado de ironía para analizar qué puede suponer para la UE una elección como la de Borrell, a la vez que se pregunta por el precio que ha pagado y que pagará España: "No me lo quiero ni imaginar... Ni tampoco el precio que toda la UE pagará por los ridículos futuros".
La red ha respondido con más optimismo del que cabía pensar a priori: