Josep Pedrerol está nervioso. Esta noche del sábado toca derby madrileño entre el Real Madrid y el Atlético, un derby que ha venido marcado por la vergonzosa carta victimista del conjunto de Florentino Pérez quejándose por los árbitros, y pobrecitos de nosotros, que nadie nos quiere ni nos pitan a favor. Una de las cartas más esperpénticas que se recuerdan en mucho de tiempo. Manda huevos, que diría aquel, que el club más favorecido sistemáticamente ahora se hagan los indignaditos. ¿Señorío? El que tengo aquí colgado. Se llenan la boca de señorío cuando todas le ponen. Cuando van mal dadas montan una campaña lamentable, por no hablar de los infames vídeos de Real Madrid TV. Y lo que es peor, contando con el beneplácito de los medios afines, serviles y vendidos a su florentineza. La caverna madridista ha puesto el ventilador y los altavoces para aplaudir las quejas del Madrid y agachar la cabeza en todo lo que diga el presidente del Madrid. Pero la Liga y el resto de clubs han dicho que ya es suficiente de este color.

Tanto Javier Tebas, como especialmente, su rival de hoy, el conjunto colchonero, han humillado el relato madridista con una serie de declaraciones y tuits sensacionales que han hecho sacar fuego por las muelas al madridismo.

Evidentemente, los que se las dan de íntegros y justos e imparciales, han corrido al grito de su amo y señor y han perpetrado momentos grotescos, especialmente, si los comparamos con qué decían días atrás. Y en este sentido, uno de los que se lleva la palma ha sido Josep Pedrerol, que estos días ha hecho un equilibrismo tan patético que da vergüencita y todo. En sus intentos por no criticar lo que todo el mundo ve, la actitud patética del Madrid, ha regalado a los espectadores momentos esperpénticos. Miren qué decía cuándo los que se quejaban no eran los del Real Madrid y miren qué ha dicho después de la carta del Madrid.

¿La guinda del pastel? Este viernes en el informativo de Jugones en La Sexta. Mientras hacía uno de sus editoriales, en el control de realización pulsan un botón antes de tiempo y se oye un sonido que ponen cuando se ve su firma... Y Pedrerol, desconcentrado y con cara de vinagre, empieza a verbalizar que no le ha hecho ni puñetera gracia. Fuera de lugar, sin saber dónde ir, empieza un diálogo con el resto del equipo ante los espectadores, que piensan que gracias a Dios ellos no trabajan allí, porque no se hace nada difícil imaginar los gritos una vez acabó el programa. Un Pedrerol retratado a pocas horas del Madrid-Atlético... Es lo que tiene querer tener contento al presidente del Madrid. Tan intensito que estaba él con su editorial, y quedo como un guiñapo...

Ojalá hoy los de Simeone ganen en el Bernabéu... Y si puede ser con escándalo arbitral, mejor que mejor... Nos divertiremos mucho viendo a los Pedrerol y compañía perdiendo los papeles un poco más.