Hacer años no es plato de buen gusto para todo el mundo. El tiempo pasa, los años se acumulan, aparecen las arrugas, los dolores de espalda, ya no entiendes las nuevas tendencias y te quedas ligado al pasado, en tu época. Así es como se sienten muchos después de soplar las velas de los cincuenta. Todos excepto, ella, Judit Mascó. Nuestra modelo más internacional es exactamente como el vino, con los años mejora, y no solo nos referimos a su profesionalidad a la hora de trabajar, lo decimos por su aspecto físico. Solo hay que verla, está increíblemente guapísima y ¡ya tiene 55! Está claro que a la modelo catalana la nueva cifra no le queda nada mal, y además, lo ha podido compartir con una de las personas más especiales para ella, Glòria, su madre.
Amigos y familiares la felicitaban por la red, pero la verdadera celebración la vivía con los más íntimos con una comida y un pastel para lamerse los dedos. La modelo y presentadora, casada con Eduardo Vicente, no ha tenido tiempo de enseñarnos al detalle la fiesta, tan solo ha querido publicarnos el momento del pastel con su madre, pero ha sido su hija Romitha, quien ha publicado algunas pinceladas de la gran comida. Toda la familia Mascó ha ido a comer fuera en una masía monísima, no hemos podido ver exactamente qué han escogido para comer, nos tenemos que conformar con los paisajes y algún selfie familiar de la celebración hasta llegar al momento del pastel. Romitha ha fotografiado a su madre, espectacularmente guapa, enseñando el pastel con una corona dorada incluida y un "Felicidades Judit" que había escrito en un pastel que parece una carrot cake.
Tal como os decíamos, Judit Mascó no sopló las velas sola, lo hizo muy bien acompañada de su madre, Glòria, quien cumplía 80, y con quien, confirmamos, tienen una gran semejanza. Ya sabemos de dónde sale la belleza de la modelo catalana, porque su madre está radiante para soplar los 80 años. Las dos con una corona dorada, un mensaje de felicitación, y una sonrisa gracias a todos los fotógrafos que debieron estar detrás de las cámaras. Y es que, Judit Mascó siempre ha dejado bien claro que su vida personal es su mayor éxito. Hace 31 años que está casada con Eduardo Vicente, con quien tuvo cuatro hijas: Maria de 24 años, Paula de 22, Romitha de 21 y Clara, la más pequeña, que cumplió los dieciocho años el pasado mes de abril. Los seis son el gran tesoro de la modelo.
Toda su familia reunida, en una comida que ya parece tradición cada año y donde siempre tiene la suerte de poder soplarlas con su madre. Este año, sin embargo, todavía ha sido más especial, con unas cifras más redondeadas. Para muchos, son dos edades pesadas para cumplir, a veces, a partir de los 50 todos se hace cuesta arriba, y para muchos, los 80 son un gran signo de vejez. Sin embargo, como os decíamos, ellas son el ejemplo de todo el contrario. Radiantes, elegantes, alegres y guapísimas. Entendemos perfectamente la carcajada de Judit Mascó, dar la bienvenida de los 55, así de perfecta y de bien acompañada, es un auténtico placer. Nosotros también nos queremos sumar a todas las felicitaciones. ¡Felices 55 y 80 años!