Julia Janeiro sigue a la suya. No es un reproche, sólo una constatación: hace lo que le sale del moño a sus 19 años. Y es feliz así, a pesar de más de un quebradero de cabeza y alguna experiencia traumática que ha vivido no hace demasiado tiempo. La hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario sigue exprimiendo su perfil virtual, haciendo que su número de seguidores crezca cada semana. La técnica, fotografías de lucimiento personal, orgullosa de su imagen, de su talante y también, todo hay que decirlo, de sus retoques estéticos. Así ha llegado en un año a un cuarto de millón de followers. El techo, sin embargo, todavía no lo ha tocado.

Las publicaciones de Julia tienen siempre algo de provocativas. Y últimamente el coprotagonista de estas historias es su novio, el italiano Tommy Rossi. Es el tercer deportista que ocupa su corazón en poco menos de un año: los dos primeros no cuajaron (ni mucho menos), pero con el delantero del Getafe 'B' las cosas parecen ir mucho mejor. Se quieren, lo gritan fuerte, no se esconden. La mezcla de juventud y pasión es su receta de éxito.

Julia Janeiro y el novio Tommy Rossi / GTRES

La parejita ha vuelto a pasar un domingo soleado disfrutando de la piscina, del bikini y el traje de baño, del bronceado y del calorcito humano. El enamoramiento es así, pleno de mimos, de besitos, de arrumacos. No los separas ni con agua caliente, es imposible. Su relación es firme, cuando menos por lo que vemos a través de las redes sociales. No hay distancia, ni la más mínima. Ya vendrá el frío más adelante y habrá tiempo para separarse unos centímetros, unos metros o unos kilómetros. Ya nos entendemos. Mientras tanto todo son  fuegos artificiales amorosos, como en esta imagen tan contundente. La titulan como "dos lagartitos al solecito". Bien, siempre que los lagartos se posen sobre una toalla... y más cosas.

Los últimos movimientos de Julia la devuelven a la casilla de salida. Sus primeras pasos en Instagram fueron de explosión, de contenidos potentes, de una actitud arriesgada. Cuando llegaron ciertos problemas derivados de sus relaciones y de una exposición quizás excesiva borró los contenidos más polémicos y calmó la cuenta. Ahora, sin embargo, vuelve la fiesta, el amor, la desinhibición. Se siente cómoda y, además, se ha quitado de encima las críticas de los internautas bloqueando los comentarios. Sabia decisión.

Julia Janeiro haciéndose selfies / @julsjaneiro
Julia Janeiro/ @julsjaneiro

Julia y Tommy acabarán el verano bien morenos por el sol. Esperamos, sin embargo, que no se chamusquen y el amor se vaya a hacer puñetas. O sí, que hagan lo que les dé la gana.