Kate Moss pasa para ser la única top model mundial que se mantiene en la cumbre décadas después de empezar. Claudia Schiffer, Naomi Cambell o Cindy Crawford han pasado al olvido y ya no protagonizan campañas publicitarias mientras la británica sigue siendo una estrella. Será por las portadas en tabloides ingleses que la fotografiaban esnifando cocaína pero su cara no se borra y sigue siendo requerida.
Algunas modelos acusan a las modistas de hacerlas pasar hambre para meterlas trajes imposibles. Tallas pequeñas que exigen evitar ingerir alimentos y sustituirlos por otras consumiciones. Kate Moss se ha resarcido comiendo lo que quiere y así luce en unas fotos en la playa de Saint Tropez, Francia, donde se la ve con bariguita de lo más natural. Ha sustituido la ingesta de ciertas sustancias por la cerveza:
Kate Moss es todavía una un icono de la moda. Toda ropa que se pone es un éxito. El look de inglesa traviesa, borracha, novia de rockeros, divorciada diferentes veces y con barriga es una combinación explosiva. Y vende.