La enésima entrevista de Kiko Rivera en el 'Deluxe' de Telecinco deja hoy unos cuantos titulares y curiosidades. El primero, y que hemos explicado a EN Blau, son las graves acusaciones del disc-jockey contra su hermana, dejando caer que Isa Pantoja no atendía a su difunta abuela cuando se ahogaba porque estaba más preocupada de su teléfono móvil. Esta familia nunca deja de estremecernos con sus vergüenzas e intimidades más oscuras. Eso sí, el público español parece encantado con los episodios truculentos del culebrón, porque hicieron líder al programa y con mucha distancia: 16'8%, una barbaridad.
Un dato espectacular que llegó sin la intervención de su presentador estrella: Jorge Javier Vázquez. El badalonés, conductor titular del espacio, fue baja. Tenía compromisos teatrales en Lorca, Murcia, este domingo, pero la mala noticia es que no ha podido representar su obra 'Desmontando a Séneca' por problemas de salud. Es la segunda vez que pasa en poco más de un mes, y teniendo en cuenta su historial médico (el ictus que sufrió en 2019) las alarmas saltan con facilidad. Parece que la situación no es en absoluto grave, y María Patiño fue la encargada de hacerse cargo de la entrevista al personaje más polémico de la estirpe Pantoja.
Ahora bien, hablando de problemas de salud, hay un tertuliano que haría bien en pasar por la consulta de su médico de cabecera y que lo revisen a fondo: Kiko Matamoros. Sus problemas para respirar correctamente traspasan la pantalla, especialmente porque el encargado de sonido del programa no tiene la delicadeza de bajar su micrófono cuando no interviene en las discusiones, los debates o las entrevistas. La primera parte de la conversación con Rivera tenía banda sonora, extraña, preocupante y molesta: la de los ruidos que salían de su aparato respiratorio. Ahora bien, por la frecuencia, tono y tipología, también podríamos hablar de otra naturaleza: Matamoros estaba durmiendo y roncaba. Como Miguel Frigenti pero con más decibelios. Si quieren comprobar de qué hablamos, hagan click en la imagen y oigan el vídeo en el minuto 24, por poner un ejemplo.
El concierto acabó, curiosamente, cuando dieron paso a los tertulianos para meter baza sobre las invectivas de Rivera. Entre ellos, evidentemente, estaba Kiko, que ya no practicaba la apnea. De hecho la cabezada, si es que se produjo, le hizo cargar las pilas al máximo, porque zurró al resto de compañeros de plató (que no dormían) acusándolos de "chupar el culete de Kiko Rivera". Patiño se subía por las paredes, y tuvieron una bronca descomunal que actuó como el mejor expectorante y broncodilatador del mercado. En todo caso, los inquietantes ruidos del representante crearon alarma entre la audiencia. Bueno, alarma y muchas críticas asqueadas como estas.
No era la noche de Halloween, pero vaya, que el 'Deluxe' fue terrorífico. Mamá, qué miedo.