El esperpento del Real Madrid y sus aficionados más hiperventilados, así como sus altavoces habituales en los medios de la caverna, no se detiene. Hace unas semanas que han perdido la cabeza de mala manera. Todo empezó con la no expulsión del jugador del Espanyol Carlos Romero por una entrada a Mbappé. Después, por un penalti en contra en el derby contra el Atlético de Madrid y este fin de semana, tercera ración de quejas, de lágrimas y de estupideces por parte de la merengada más recalcitrante. Ahora, por un penalti no pitado, dicen, a favor del conjunto blanco, por otro penalti que sí le pitaron a favor de Osasuna y por una expulsión de un jugador blanco, Bellingham, después de mandar a hacer puñetas al árbitro Munuera Montero.

Ahora resulta que en la capital todos son políglotas, todos saben perfectamente inglés y todos entienden de lenguas para hacer tesis y auténticos estudios sociológicos sobre si el jugador inglés le dijo "Fuck off" o "fuck you" al colegiado y cuál es el sentido de cada expresión. Ahora, los ofendiditos madridistas han alzado el grito en el cielo (qué extraño que no paren de quejarse, con el señorío que siempre tienen) porque consideran que no es lo mismo llamarle una cosa o la otra al árbitro, que al oír el menosprecio del jugador, sea quien sea, le enseñó la tarjeta roja. Ahora toca hacer presión para volver a hacerse los mártires, y para evitar una sanción grande a su jugador. Los Pedrerol, Marca y compañía ya han empezado a escandalizarse y bailar a la música que marca il capo... Es increíble la capacidad que tienen algunos de hacer el ridículo, llevando incluso a especialistas a leer los labios, y en no cortarse un pelo. Aquí tienen unos ejemplos:

marca
 

Ahora el madridismo más victimista, es decir, el habitual siempre que las cosas no salen como ellos quieren o les pitan cosas a favor, ha sacado fuego por las muelas y ha empezado una campaña sobre si dijo fuck off y no fuck you que da mucha vergüencita. Más vale tomárselos a cachondeo, porque son grotescos. Y eso es lo que han hecho muchos culés recuperando una imagen de dos cracks blaugranas, dos jugadores que en medio de toda esta polémica, han inspirado a los aficionados con una imagen maravillosa de hace unos meses. Lamine Yamal y Jules Koundé son los protagonistas, especialmente el francés, que en un momento de relax, después de un entrenamiento o partido, se puso un antifaz para dormir y evadirse de todo. ¿Y qué ponía en el antifaz?: Bingo: "Fuck off". Una imagen de hace unos meses que Lamine publicó y que ahora ha hecho retrocerse a la merengada ultra:

El miércoles hay un Real Madrid - Manchester City en la Champions... A ver si los de Guardiola le dedican un fuck off, fuck you o lo que sea a los de Ancelotti... futbolísticamente hablando.