Nos encanta cuándo se dan noticias como estas. La mejor de las noticias, de hecho: embarazos y nacimientos. Y ahora, quien está pasando por estos momentos es una actriz sensacional a la que vemos cada semana en TV3 desde casa. Bueno, eso era así hasta ahora, porque ya ha llegado el momento de detenerse y estar por lo que tiene que estar. Hablamos de la intérprete e imitadora Lara Díez Quintanilla, un rostro muy querido y habitual de los espectadores catalanes gracias a sus impecables imitaciones en el programa Polònia, cada jueves en TV3. Especialmente, por la presidenta de los madrileños, Isabel Díaz Ayuso. En su piel nos ha regalado números absolutamente delirantes y maravillosos, con una Ayuso desatada y un pelín tocada del ala, exageración sublime de la política madrileña, como esta Loca salvaje, parodiando la Potra salvaje que lo lleva petando desde el pasado verano. O este Facha, versión brillante del Zorra de Nebulossa, la última representante de España en Eurovisión.

Así es como vemos siempre a Lara, maquillada como sus alter egos, cada jueves en Polònia, pero ella es un pedazo de actriz de la cabeza a los pies, que más allá de las imitaciones que la han popularizado, ha participado en diferentes obras muy recomendables.

Los que la quieren, familia y amigos, y también los espectadores de TV3, la habrán visto las últimas semanas con un ligero y significativo cambio en su cuerpo: una más que evidente barriga que implica muchas cosas buenas y la llegada de una nueva vida que le cambiará a ella, y valga la redundancia, su vida. Una barriga de embarazada que emociona, y que en Polònia han aprovechado de manera maravillosa para seguir contando con ella, haciendo cachondeo con Ayuso y las cápsulas que tenía que dejar grabadas para el programa... Unas cápsulas que, tal como han anunciado en el mismo programa, ha llegado el momento de utilizar. Como dicen los compañeros de Polònia, "Parece que utilizaremos estas cápsulas antes de lo que teníamos previsto. (Enhorabuena, Lara)":

Lara, pues, que se tomará la baja para encarar la recta final de su embarazo como Dios manda. Nos sumamos a las felicitaciones a Lara por este nuevo/va polònio/a.