Laura Escanes ha escrito un libro a flor de piel. Piel de letra es una recopilación de pensamientos de la instagramer que sorprenderá a muchos. No es el típico volumen hortera o frívolo sino que contiene pensamientos íntimos de una joven que acaba de cumplir, el 13 de abril, 22 años. En Blau ya ha podido leer un ejemplar y de entre todas las vivencias autobiográficas de la esposa de Risto Mejide sorprenderá una especialmente: Laura Escanes fue víctima de una agresión sexual. Poca broma con eso. Lo explica de manera seca, sin morbo, íntima y como advertencia para todas las jóvenes lectoras. El capítulo tiene un título lo bastante explícito: Desde el infierno. Y su primera frase pone los pelos de punta: "Aún tiemblo si recuerdo ese momento".

Este es el fragmento:: Cuántas veces necesitabas escucharme gritar 'no' para que eso no sucediera. Cuánto empujones y arañazos no debería haber evitado para que te alejaras de mi piel. Me manipulaste, me sobornaste y me obligaste a dejarme hacer algo que no quería. Algo que me daba asco. Algo que me mataba por dentro. Fue en el momento que rompiste mi ropa cuando te veía desde el infierno. Y hasta me veía a mí misma gritando (que no de placer) desde lo más alto del techo. Qué asco. Cuántas veces te habrán dicho que hay gritos que piden socorro y no sexo. ¿Hace falta decir que las minifaldas no piden a gritos ser bajadas? No sé dónde estarás ahora, pero sí que sé que eso lo llevarás clavado en tu mente para siempre. Yo no soy culpable, yo no me dejé. Yo confiaba en ti, y tú te aprovechaste de mí. De mi inestabilidad y de mi alma rota. De mi sangre en alcohol. De mis lágrimas. Ojalá te arrepientas toda la vida de lo que me hiciste vivir. De mi mayor pesadilla.

El libro se podría haber titulado Piel de gallina. Leer el capítulo provoca escalofríos. El agresor sexual es una expareja de la joven. No explica que lo denunciase. Laura Escanes rememora aquellos instantes como una cartarsis. Ha reconocido que lloró mientras lo escribía:  Me gritó. Me insultó. Y ya dejó de ser normal. Eso no era normal. Me dejó en la puerta de casa, con la bolsa en la acera, sin poder entrar. Me amenazó con grabaciones y fotografías. Me amenazó con quitarme todo lo que más quería y con dejarme sin amigas. Me empujó contra la pared y me dolió. Me hizo daño. Me pegó.Y dejó de ser normal para convertirse en mi pesadilla pero también en mi lucha. 

Más de un cuarto de millón de visitas han escuchado la voz de Laura Escanes. El 23 de abril podrán abrazarla en persona mientras firme ejemplares de Piel de letra.