Leo Messi lleva toda una vida en Catalunya. Desde Madrid, sus detractores a menudo han intentado atacarle para atacar de rebote al Barça y a Catalunya. ¿El argumento utilizado? "No habla catalán y sólo se siente Argentino". Pero hoy el '10' del Barça ha callado más de una boca. Después de Guardiola reivindicando el derecho a decidir de los catalanes, ahora es el mejor jugador de la historia quien se llena la boca elogiando a Catalunya.
En una entrevista para el diario Sport, el argentino explica que "yo me siento de acá. Vine con trece años y soy un amante de Barcelona y de la manera de vivir de acá. Al principio, cuando llegué paseaba más por la ciudad, pero después, al mudarme a Castelldefels, hago más vida en casa, en familia". Una familia al lado de Antonella Roccuzzo y sus tres hijos, Thiago Mateo y Ciro. Hablando de las costumbres catalanas asegura que le gusta mucho el pan con tomate, aunque a sus hijos les gusta más: "Mis hijos son más de 'acá' que yo. Ellos nacieron acá y son de acá. Obviamente tienen las raíces argentinas, pero ellos nacieron acá y tienen todas las costumbres del catalán". De hecho, en alguna ocasión ya se vio al pequeño Matías cantando En Jan petit quan baila mientras le grababa su padre:
"El chiquito habla catalán y dice muchas cosas", añade al jugador azulgrana, que también reconoce que ha llorado en el Barça, pero por unos hechos provocados desde Madrid. "Lo de Hacienda fue muy duro. No de llegar a la depresión, pero sí por la manera como se me atacó, se decían cosas de mi, de mi familia, de mi papá, de mi gente... Fue duro, sobretodo porqué venía de Madrid". Messi apunta directamente a la capital de España y a la prensa y la opinión pública más rancia y destaca el cobijo que tuvo en Catalunya: "Me sentí muy atacado y tuve la suerte de tener el respaldo de mi gente, de Barcelona, de Catalunya, del periodismo de acá y me hizo estar mas tranquilo".
"Era la orden: atacarme a mí, pegarme, de aprovechar el momento de debilidad. Pasaba por ahí, porque era de Madrid. Incluso sabiéndolo, me molestaba y me dolía". Puedes ver el momento cliqueando en la foto a partir del minuto 8:
Seguro que en Madrid, escuchar a Messi hablando así habrá hecho más daño que verle marcar un hat-trick en el Bernabéu.