Leonor es la estrella de los premios Princesa de Asturias. Todas las miradas se giran hacia la princesa el día que Casa Real se pone de largo en el gran acto civil de este tipo de premios Nobel españoles que premian autoridades mundiales en temas humanos. Una buena manera de alejar Leonor de la imagen castrense que el Ejército estará forjando durante 3 largos años, disfrazándola de soldado de tierra, marinero y paracaidista como si fuera una GI Joe. Para ser jefe del Estado tiene que saber pronunciar discursos, no saber conducir carros de combate. En Oviedo la primera hija de Felipe está cumpliendo con su papel, discreto, elegante, sobrio y locuaz. El problema que tiene la chica es que va peor vestida de civil que de militar. Los estilistas de Zarzuela han conseguido que Leonor sea más elegante de uniforme que de gala. Un absurdo y en el caso de una futura reina, un peligro. Si el pueblo la ve como soldado mejor que oposite a sargento, no jefa del Estado.
Leonor hará 5 apariciones en Asturias: jueves a las instituciones por la tarde y al concierto inaugural por la noche, viernes recibiendo los premiados al mediodía y la gala por la noche y sábado en el pueblo ejemplar en Cabrales. Para la tercera aparición ha escogido un look muy extraño, que demuestra que en Zarzuela cada uno va a lo suyo. Nadie piensa en el efecto conjunto, y si Leonor dice que tiene frío en Oviedo en octubre y Letizia y Sofía creen que hace calor, pues que la princesa salga con unas medias espesas, una especie de leggings, pantis o gruesísimas medias que daban una impresión fea, peor en comparación con las piernas desnudas de Letizia y Sofía, a pelo:
La foto deja en evidencia a Letizia que tiene dicho a las estilistas re-riales que en ningún caso, piensa lucir esta prenda, unas medias negras. Era capaz de aparecer con la siempre elegante Meritzxell Batet en enero, en el más crudo invierno, al aire libre con la pierna desnuda y Batet con unas medias espesas. Batet, que como presidenta del Congreso tenía asesores de estilismo mejores que Letizia, mantenía los zapatos de tacón pero con medias gruesas. Sabe que ir con las piernas al aire cuando hace mucho frío no solo es ridículo sino contra el protocolo y lo peor, de mal gustr, por frívola. En cambio Letizia sigue obsesionada a mostrar las piernas musculosas, no se pone media y daba cosa mirarla.
Según Vanity Fair son "medias tupidas": "El diseño es de la firma francesa Maje y lleva escote en uve, falda de tablas cortado por encima de la rodilla y manga francesa. Lo ha acompañado de unas medias negras tupidas que se confundían con los zapatos terminados en punta y de tacón fino. La princesa Leonor ha completado su estilismo con un bolso de mano en piel negra y unos pendientes de aro dorados". Estaba en Oviedo y en un lugar cerrado, Leonor ha dicho que la moda se la solpa y que se pone medias. Bien por su personalidad, pero el efecto es extraño, feo y queda como el opuesto a Letizia. Era eso lo que quería.