Letizia Ortiz y Sonsoles Ónega son amigas. Muy amigas. Este fin de semana nos ha quedado bastante claro, tras la visita sorprensa de la reina de España a la firma de libros de la presentadora de Antena 3 y flamante ganadora del Premio Planeta. Un gesto poco casual, justo cuando la de "Y Ahora Sonsoles" está recibiendo críticas furibundas por la novela, pero también épico: la leyenda explica que la mujer de Felipe se comió una cola de 40 minutos para poder saludar, abrazar, besar y felicitar a su excompañera a CNN+, confesora de su compromiso real y testigo en la boda con el príncipe. Era una escapada de incógnito, pero no tanto. Había mensaje. Y eso levanta ampollas.
La prensa cortesana se deshacía en elogios a la pareja, destacando su naturalidad, espontáneas, próximas, humanas como tú o como yo. Supimos cómo le llama Ónega a su colega, un nombre diferente al del resto de mortales: Let. El diminutivo del diminutivo, alguien que se pone una Z en el nombre tiene que tener un mote bien cuqui, trendy, cool. Algunos, como| han explicado EN Blau, opinan que quizás es una pullita, pero aquello del carácter mandón de la asturiana: Let's go. Let's do it. Let me alone. Let, let, let. Vete a saber. Pero tenemos una mala noticia para las protagonistas: no han convencido. Especialmente al nuevo enemigo común de reina y su favorita: Bob Pop, crítico de televisión, experto en moda, columnista, escritor, actor, guionista y tertuliano de diferentes espacios. Por ejemplo, el 'Hoy por Hoy' de Àngels Barceló en la SER. El origen de las primeras bofetadas al libro y al galardón de Sonsoles.
Roberto Enríquez, el nombre real del excolaborador de Andreu Buenafuente, se despachaba a gusto: "¿Por qué no lo llaman Premio Atresmedia a empleada del año y se dejan ya de tonterías?" Unas palabras que crearon alboroto, llegando a afectar a la autora de 'Las hijas de la criada', y haciendo que defendiera al Grupo Planeta, quien paga la fiesta, el premio y su sueldo en Antena 3. Después de Bob llegó la puntilla en forma de artículo demoledor en El País: "Fallido folletín, autoinmolación, ridículo, nadería". Fulminada. Pues bien, este es el libro que Let pidió con entusiasmo que le dedicara la Sonso, una "nadería ridícula", ofreciendo un espectáculo dantesco para el crítico de la SER. Y no se ha callado.
Bob Pop:"Es un poco discutible que si tú eres reina, aunque sea tu amiga la ganadora del premio Planeta, tú puedas irte al Corte Inglés a promocionar el libro de tu amiga, que sabes que va a hacerse viral, que todo el mundo lo va a grabar. Estamos pagando entre todos esta promo". Barceló: "La reina convertida en influencer pagando todos". Roberto hurga más: "Uy, qué crítica tan mala han hecho a mi amiga. Espérate, que voy yo ahí y le doy un achuchón. Esto explica muy bien la influencia cultural: frente a la crítica de Babelia, o la imagen de la reina apoyando a su amiga, ¿qué va a hacer que venda más libros? Amigos críticos culturales, dejad lo vuestro. A la mínima os va a desautorizar la reina". Let, hundida. Y la amiga, de rebote. Jugada maestra.