El libro que ha escrito Gemma Nierga de sus conversaciones en prisión con Jordi Cuixart ha sido presentado en Madrid con la presencia de 3 periodistas de dos imperios antiindependentistas: PRISA (Pepa Bueno, la Ser) y Planeta (Antonio G. Ferreras y Jordi Évole, La Sexta). Lo más paradójico es que han recibido de todos lados. El unionismo les ha insultado por prestarse a presentar el libro de un "golpista". Escribe El Español que a Nierga "se la ha comido el personaje (Cuixart)" y que los periodistas que le presentan su libro tienen "síndrome de Estocolmo". Un absurdo, aquí el secuestrado es Cuixart.
Toda la crónica del diario unionista desprende un tufo ultra desde el título, que acusa a los cuatro periodistas de "blanquear a Cuixart". El detergente de Vox es El Español o Atresmedia, que invita la extraparlamentaria ultraderecha a debatir. En el lado independentista ha molestado que alguien tan connotado contra el procés como Ferreras, director de La Sexta y que hablaba de "sangre y muertos" enCatalunya, ligue su nombre al de Jordi Cuixart. Mientras digitales ultras como Libertad digital hablan de "Entusiasmo golpista con La Sexta" porque Ferreras y Évole aceptaron presentar el libro con la frase "Por Cuixart voy", los tuiteros indepes dudan qué hacían a algunos de los oradores en el acto madrileño.
En la trinchera unionista lo contrario: Ferreras y Évole traidores a la causa antiindepe:
Plantear un acto así un miércoles en Madrid que Rajoy declara en el Supremo, Sánchez pone fin a su presidencia en el Congreso de los diputados y el Real Madrid se hunde 0-3 con el Barça no es "blanquear" a Cuixart. Es ocultar a Cuixart.