Ya hace tiempo que la maravillosa Lídia Heredia vive y trabaja en los Estados Unidos, concretamente en Washington, como corresponsal de TV3 en el país norteamericano. La de Badalona ya se ha acostumbrado a su tipo de vida en aquel país y son una delicia sus crónicas, tanto cuando tienen un punto de vista político, hablando sobre Trump, Biden y compañía, como cuando tienen más cariz social, e incluso personal, sobre el talante y la manera de hacer de sus nuevos vecinos. Y en este sentido, son sensacionales las contracrónicas que hace para el programa El suplement de Roger Escapa en Catalunya Ràdio.
Heredia lleva tiempo sorprendiendo a los oyentes del programa de fin de semana en la emisora pública catalana, especialmente cuando explica intimidades y anécdotas de su día a día. Insuperable fue cuando explicó que su vecino de enfrente de casa siempre iba medio en pelotas, cocinando sin ropa, porque allí tienen puesta muy alta la calefacción en invierno. O alguna propuesta que ha recibido. O cuándo hablaba de los súpers, de San Valentín o de algún concierto sorprendente al cual había ido. Este sábado, uno de los temas que han tratado Heredia y Escapa ha sido el Spring Break, esta especie de vacaciones de semana santa donde muchos jóvenes del país "viajan, hacen turismo... y salen de noche". ¿A dónde? A fiestas que se montan, pero también en bares y en discotecas. Detengámonos aquí. Ya saben que en los Estados Unidos, la edad mínima permitida para acceder son los 21 años, y no los 18 que tenemos aquí.
El presentador recuerda qué pasaba en su época cuando él y los amigos querían entrar en una discoteca sin tener la edad permitida, cuando utilizaban aquello de los carnets de identidad falsos. Lídia apunta entonces sobre el "mercado negro de 'fake ID', de carnets de identidad falsos. Valen 70-80 dólares. Te los envían por correo, camuflados en un libro, con instrucciones". ¿Qué pasa? Que las discotecas lo saben y a veces tienen máquinas que detectan si los carnés son oficiales o no. "¿Sabes que he descubierto? No lo dirías nunca...", revela la periodista. "Hay gente que se saca el carnet de identidad de la República de Catalunya". Y Escapa: "¿¿Qué dices, ahora??. "Lo que oyes... Y lo utilizan para entrar en las discotecas".
Heredia recuerda aquel carné, "ahora ya no estamos en época tan efervescente del procés, pero algunas webs hacían carnés, ni que fuera para hacer ver que. Te lo prometo". Explica Lidia que se lo sacan, se lo hacen enviar a los Estados Unidos y lo utilizan: "Aquel carné, el portero de discoteca no sabe qué es, no saben qué país es y la máquina no lo puede comprobar. 'Soy de la Repúblicana Catalana' y para adentro".
No sabemos si algún día tendremos la independencia. Como dice Roger Escapa, "al menos sirve para que los jóvenes catalanes y no catalanes entren en las discotecas".