Tres meses y pico| sin su "Buen día, son las ocho" se han hecho largos. Este martes 3 de abril ha sido el día del retorno de la primera voz de TV3, la de la directora de Els matins. Lídia Heredia tuvo un accidente en la rodilla esquiando en diciembre y hemos visto su recuperación durante todo el invierno. La audiencia no lo ha echado de menos pero la ha echado de menos. El programa presentado por Pere Bosch ha hecho audiencias descomunales pero los espectadores añoraban a su presentadora principal. Más que su primera noticia, sobre fiscalía y CDR, era esperada su primera frase: "Buen día, son las ocho. Contenta de saludarles". Incluso el caricaturista del programa, Kap, estaba inspirado y le ha copiado el color de la americana del retorno:
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"Con estas horas de contemplación que he tenido me he dado cuenta de que en este país no hacía tanto viento como ahora", le decía a la meteoróloga. Se le notaban a Heredia las ganas de volver. La dolce far niente es aburrida. "Confío en que esto sea cómo ir en bicicleta y no se me olvide". Y entrevistaba otro icono de los periodistas/despertadores del país: Antoni Bassas. Consejo de maestro sobre si haber salido de antena un tiempo puede hacerte caer del pedestal de privilegio: "Cuando cada día haces el mismo trabajo te puedes caer si pones al piloto automático".
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Heredia ha confesado en la tertulia que esperaba haber vuelto con un president ya investido. Quizás el Parlament la espera a ella. "Benvinguda Lídia" le decía el omnipresente Ernesto Ekaicer. Todos se notaban cómodos con ella, incluso el director de una cadena que le hace la competencia, BTV. Sergi Vicente no venía a solidarizarse con TV3 sino a vender su libro sobre China. Y otro Sergi, Pàmies, ha hecho ironía por haber ideado una sección para el programa sobre Vida saludable, ahora que Heredia no camina fina.
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El otro presentador, su sustituto 3 meses Pere Bosch, no ha aparecido en todo el programa. Confiamos en que esté descansando y no esquiando.