Una de las mejores cosas que se pueden hacer los fines de semana, desde En Blau no nos cansaremos de repetirlo, es escuchar la radio, concretamente, los excelentes programas matinales que se hacen en nuestra casa, con dos programas imprescindibles en el dial de los sábados y los domingos como son el Vis lliure de Xavi Bundó en RAC1 y El suplement de Roger Escapa en Catalunya Ràdio. Y en este programa hay una sección maravillosa protagonizada por la no menos maravillosa Lídia Heredia.
La flamante nueva corresponsal de TV3 en los Estados Unidos desde el pasado septiembre explica cada semana cómo es su día a día en Washington y cómo se va adaptando a los curiosos y peculiares vecinos norteamericanos que la rodean. Cómo es entrar en un supermercado, cómo pasan el día de San Valentín y sobre todo, lo que enamora más a los oyentes es cuando revela algunas curiosidades sobre aquellas pequeñas cosas, sobre aquellas pequeñas experiencias que le han tocado vivir, y que muchas de ellas han dejado a los oyentes con los ojos como platos... Como lo que explicó de sus vecinos.
¿Dónde está viviendo la periodista de Badalona desde que aterrizó en los Estados Unidos?: "Yo ahora estoy viviendo cerca del trabajo, en un apartamentito, pero efectivamente veo al vecino... Veo a los dos vecinos, concretamente que tengo en frente, que cada tarde, uno de ellos, se pasa la tarde en la cocina", confesó a las pocas semanas. ¿Qué cocina?, no lo sabe. Pero ¿cómo cocina?, sí: "Cocina muchísimo. Yo he tenido tentaciones de ir y decirle: 'Hazme un tupper'. Yo no sé qué hace, pero cocina muchísimo, mucho, mucho, mucho... Y con la parte de arriba, aquello... un poco 'a torso descubierto'"... Escapa se abonaba al oírla: "Que le dirías 'tápese un poco!'". Y eso le hacía pensar a Heredia que "ha venido un poco de frío, cuatro días un poco de invierno, y debe pasar lo mismo con las calefacciones: cuando llega el invierno las calefacciones deben ir a tope y te permite cocinar desnudo, que es lo que está haciendo mi vecino todos estos días"... Eso pasaba cuando allí soplaba el viento, hacía frío, había temperaturas heladas de otoño-invierno y el termómetro marcaba el bajo cero. Pero, ¿y ahora que estamos de pleno en la primavera? ¿Y ahora que hace solecito y hay más de 20 grados?
Hablaba Heredia de que se ha sorprendido al encontrar entradas para ir al cine a 5 euros, de aquellas de última hora: si en el cine, cuando la peli está a punto de empezar, todavía quedan asientos libres, descuento al canto. "Es la máxima del capitalismo también aplicada a los precios de alquileres", dice Lidia, que está pensando en engalanarse. "Estuve mirando precios, y tú puedes hacer un alquiler al alza, si regateo para abajo, no encuentro ningún piso, porque aquí esto no va así". Al oírla, Escapa, preocupado, quiere saber si "¿¿te has cansado del vecino misterioso que cocinaba desnudo??". Y ella tranquiliza a los fans: "Nooooo, no me he cansado, porque además, aquí hace muchísimo calor, hemos pasado una semana a treinta grados de máxima, y ya veo que (los vecinos) empiezan a desnudarse otra vez... No me he cansado del vecino, pero quizás tendré que acabar cambiando de lugar por cuestiones familiares".
Una Lidia Heredia que vivirá su primer Sant Jordi desde la distancia. Seguro que será un día especial... ¿Le regalará el vecino nudista una rosa? No lo sabemos. Lo que sí sabemos es que si ella tiene pensado regalarle un libro para hacerle saber las costumbres catalanas, quizás le irá bien... Pero le iría mejor que le regalara unos calzoncillos para cubrirse el cocido, así quizás Lidia se lo repiensa y no hará falta que se busque otro piso...