Desde nuestra humilde ventana, En Blau pedimos que hagan una serie sobre Las aventuras de Lídia Heredia en los Estados Unidos. La nueva y flamante corresponsal de TV3 en el país norteamericano regala perlas radiofónicas de su día a día que se merecerían tener formato de serie. La de Badalona, maravillosa, es única explicándole a Roger Escapa en El Suplement, cada fin de semana, cómo le va el día a día en su nueva casa, nueva ciudad y nuevo país. Y lo que explica es siempre sensacional. De momento, tomen nota, hemos sabido que su vecino tiene tendencia a cocinar en pelotas: "veo al vecino... Veo a los dos vecinos, concretamente que tengo en frente, que cada tarde, uno de ellos, se pasa la tarde en la cocina. Cocina muchísimo. Y con la parte de arriba, aquello... un poco 'a torso descubierto'... Que le dirías 'tapese un poco'!. O que le hicieron una proposición sobre Halloween: "Literalmente se vuelven majaras con este tema. Tengo una propuesta para salir de noche este sábado y se tiene que ir disfrazado. Me lo estoy pensando un poco. ¿Me animo o qué"?. Finalmente, no se disfrazó: No estaba a la altura Roger. Aquel disfraz de Minnie Mouse de mi amiga yo no lo podía igualar de ninguna manera".

Lidia Heredia / Foto: Montse Giralt

Ahora está a punto de vivir otra de las tradiciones norteamericanas más sonadas, probablemente, la que más, con diferencia. Porque si una cosa enloquece del todo a los americanos es Thanks Giving. El día de acción de gracias donde todo el mundo se larga y recorre medio país para volver a casa y celebrarlo en familia. Heredia, que ya ha descubierto la rasca que hace allí ("Ahora estamos a 4 grados, pero para la próxima semana se esperan temperaturas de mínima -3, máxima 2 grados positivos"). Así, con el fresco, ha hablado del día marcado en rojo en todos los calendarios en los Estados Unidos. Y prohibido pasarlo solo, como ella: "Tengo una amiga que en un avión le dijo a la mujer de al lado que 'es Thanks Giving, pero yo estoy sola' y acabó directamente del aeropuerto en casa de aquella mujer".

Lídia Heredia / RAC1

"Aquí encuentran realmente muy triste que no encuentres un lugar donde ir por Thanks Giving, por lo tanto, yo espero que alguien me adopte los próximos días y no tenga que hacer el pavo aquí sola", reconoce ella. "Esta es la semana del año, el trabajo baja muchísimo, es la semana en que se viaja, Washington queda desierto, todo el mundo se va a su casa, con la familia, el viernes, Black Friday, mucha gente hace fiesta y empalma con el fin de semana... Es más que Navidad", dice la periodista sobre la locura que llega cada año con el cuarto jueves de noviembre, como el próximo 24. "Lo celebra todo el mundo, la fiesta grande que los une a todos". Pero atención, Lidia va avisada por el tema pavo, "que parece una cosa muy buena, pero me han dicho que la carne queda seca, seca como un bacalao. Se hace bola. Ya he visto alternativas al turkey. Estos días los supermercados tienen unas neveras enormes con pavos envasados al vacío que además han subido de precio". Heredia, sin embargo, se sorprende todavía más con los perros. Ya dijo que por Halloween vio gente disfrazada como los perros, pero es que realmente "hay muchísimos, lo vi desde el primer día. Y concretamente hay una raza que no paro de verla". Incluso paró a una mujer en el supermercado y la abordó: qué perro es, qué raza... "y lo entendí todo: es un perro que hace años que está de moda, una raza diseñada mezcla entre golden y doodle, 'caniches'. La mujer me dijo que 'es un perro perfecto, puedes escoger el tamaño, no deja pelo, no hace alergia, son inteligentes, sociables, un perro hecho a medida". Y lo mejor: es un perro que no sé si están bien recién hechos porque caminan como gerchos. Está infestado".

Golden Doodle... en Washington los hay en cada esquina

Lídia, sin embargo, ha dejado lo mejor para el final de su conexión con Roger Escapa. Cómo está la situación con su célebre vecino. Ella misma confesó apenada que después de cocinar mucho desnudo, viéndolo por la ventana, desaparecieron del mapa, él y su hermano, y que habían venido a vivir una pareja mayor, que parecían ser sus padres. La alegría de Lidia, sin embargo, este sábado, cuando reconoció que "han vuelto, Roger, han vuelto. Continúan... Deben tener una calefacción muy fuerte porque van en manga corta, y yo voy muy abrigada en casa. Yo estoy contenta porque me sentía un poco huérfana. Yo los veo en forma, sigue haciendo tuppers...". Escapa, maravilloso y socarrón, mete baza: "Yo creo que puedes hacer el Thanks Giving, Acción de Gracias, en casa del vecino, y así, escúchame, tenemos material para el próximo capítulo". Ella acepta la propuesta encantada: ¿"No lo descartes, eh?, intentaré hacerles señales desde mi ventana, a ver si les doy pena"...

Creemos que si Lidia les demuestra que es uno de los suyos, que también cocina con poca ropa, tiene sitio seguro en mesa.