El Barça está viviendo una temporada deportiva más que complicada con respecto al primer equipo de fútbol masculino. Desde que Xavi es el entrenador, parece que de vez en cuando hay más brotes verdes, pero insuficientes para remontar un curso muy decepcionante. Mañana en Arabia Saudí hay un partido que puede marcar un antes y un después... o todo lo contrario. Una semifinal de Supercopa contra el Real Madrid. La meta es muy difícil viendo los resultados del equipo, pero no será por ilusión. Hay quien se deja la piel sobre el césped como el primer día, como Gerard Piqué. Ahora bien, si el capitán está destacando por alguna razón no es precisamente por lo que hace en el terreno de juego, no. Más bien por lo que escribe en las redes sociales y los cadáveres (mediáticos) que deja por el camino.
Un buen ejemplo es lo tira y afloja que mantiene con un excandidato a la presidencia del club y que perdió por goleada frente a Joan Laporta: el abogado Toni Freixa. El intercambio de golpes entre ambos ha sido monumental durante las últimas semanas, con un claro ganador por K.O. ¿Una pista? Su segundo apellido, paradójicamente, es Bernabéu. Efectivamente, se trata del central. Primero durante un encontronazo por la renovación o no de Ousmane Dembelé, acusando a Freixa de no pagar a sus colaboradores de campaña. Después por un tuit que Toni borró después de publicarlo. Era feo: relataba el menú que el deportista había comido aquel día y que no correspondería, según su opinión, al de un deportista de élite. Gerard lo desmenuzó: "Ahora me tomaré un gin-tónic a tu salud. Ya puedes ido borrando los tuits, sinvergüenza".
Te has equivocado con el entrecot.. era butifarra. ¡El resto todo ok! ¡Y ahora me haré un gintonic a tu salud! Ya puedes ir borrant los tweets, sinvergüenza. pic.twitter.com/tiYHuIw8HQ
— Gerard Piqué (@3gerardpique) January 3, 2022
Pues bien, la siguiente disputa tuvo a un periodista de TV3 y presentador muy veterano como protagonista. Lluís Canut aseguraba en el programa 'Onze' de Xavi Valls que el defensa, lejos de haberse recortado el sueldo como anunció hace meses, seguía cobrando una verdadera fortuna: 28 millones de euros brutos. La respuesta, épica: publicar su nómina en Twitter. Una cifra dejaba asombrado a todo el mundo: 2.328.884,39€. Muchísimo dinero, pero muy lejos de lo que afirmaba Canut. El mensaje que acompañaba el extracto, demoledor: "Personajes como este cobrando de una televisión pública para defender a sus amigos. Aquí tienes el 50% de mi nómina cobrada a 30 de diciembre. Respétate un poco". El alboroto fue mayúsculo, e incluso el F.C.Barcelona tuvo que desmentir la información de Lluís.
Canut ha acusado el golpe y anoche, en el mismo plató de TV3, dio explicaciones al respecto. No ha convencido a los espectadores, pero sí que ha conseguido un hecho: que la cuenta de Twitter del programa haya estallado. A estas alturas las palabras del periodista acumulan centenares de respuestas, algo nado habitual en otras publicaciones. Lluís dice que se siente dolido y atacado, que no entiende que critiquen su profesionalidad y que no tiene ningún interés de hacer daño al Barça. Juzguen ustedes mismos lo que cree la audiencia, pero una palabra se repite a menudo en el timeline: "Vergüenza".
����@canutmania"Em duele que se haya dudado de mi profesionalismo y mi barcelonisme"#OnzeE3 pic.twitter.com/7OZhPah6Hy
— Once (@OnzeTv3) January 10, 2022
A veces es mejor callar que alimentar un incendio de este tipo. Es una idea, claro: cada uno hace lo que cree conveniente con su carrera y su tranquilidad.