El Museo de Lleida ya no tiene las obras de Sixena. La retirada se ha efectuado de buena mañana, sin ningún tipo de resistencia, más allá de una pequeña concentración en las puertas del edificio (que se ha convocado una vez acabada la retirada de las obras). Este suceso ha estado calificado como trágico por los leridanos, que se sentían suyas estas piezas. Un usuario ha recogido el minuto a minuto en un hilo de Twitter:
Desde el año 2017 que este tema es muy polémico, personalidades catalanas de todas partes se han quejado y han señalado el caso desde entonces, pero parece que nada de eso ha servido para detenerlo. El director de comunicación de Junts per Catalunya, Pere Martí, ha asegurado que se trata de un espolio del Estado español.
Lluís Llach, abiertamente independentista y muy activo a la política catalana, ha comparado esta situación con una que también es consecuencia directa de la aplicación del artículo 155, hace ya casi cuatro años: la retirada del tercer grado penitenciario de los presos políticos.
La similitud es obvia a simple vista, sólo hay que ver la nula resistencia que se ha opuesto en ambos casos, que, a la vez, son muy dolorosos para la sociedad catalana.