La madre italiana de Miguel Bosé, Lucia Bosé, está pasando por un momento muy delicado. Al menos si hablamos desde un punto de vista judicial.

La actriz del pelo azul se encuentra a la espera de juicio por el caso de un dibujo de Picasso del que se habría apropiado. Bosé asegura que "La chumbera" siempre había sido suyo, aunque en la parte posterior aparece una dedicatoria para "Reme". Y Remedios es precisamente el nombre de la que durante 50 años fue la mujer de la limpieza en casa de Lucia Bosé.

Lucia Bosé | EFE

Remedios murió en 1999 y, años más tarde, Lucia Bosé se vendió la viñeta por 198.000 euros. Las herederas de Remedios, sus sobrinas, consideran que el dibujo les pertenecía, y ahora llevan a Bosé a los tribunales por haberse quedado primero con "La chumbera" y posteriormente con el dinero de su venta.

El juez considera que, para su veredicto final, el testimonio de Miguel Bosé es clave. Y su madre está furiosa. Las cámaras de Telemadrid la han pillado en el coche y se apresuran a preguntarle por el asunto. "¿Cómo se encuentra su hijo Miguel"?. De golpe, le cambia el rostro: "¿Quién es Miguel?¿Qué Miguel? No conozco a ningún Miguel".

Lucia Bosé estalla contra su hijo, que últimamente está inmerso en otra batalla con su ex-pareja, Nacho Palau. El cantante no necesita más dolores de cabeza. Por otro lado, a ella le piden dos años de prisión. Una condena para la que el testimonio de su hijo es fundamental. Miguel podría acabar encerrando a su madre entre rejas.

Lucia Bosé lleva un sombrero. Si no, veríamos cómo su pelo cambia de color. De azul eléctrico a rojo intenso, enfadada como un demonio.