Cuatro necesita audiencia, y para conseguirla ha optado por adaptar Ven a cenar conmigo para hacerlo más atractivo. ¿Cómo? Haciendo que cuatro famosos sean los protagonistas. Este martes han emitido la primera de estas cuatro entregas VIP, con Ana Obregón, Lucía Etxebarria, Rappel y Víctor Janeiro.

La polémica escritora ha sido la primera en hacer de anfitriona, invitándolos a un menú marroquí que no gustó nada a Ana Obregón. Uno de los atractivos principales del programa era la casa de Etxebarría, que mostró después de afirmar que tenía claro que no gustaría: "Todo el mundo me dice que está desordenada y es un caos, pero en este caos encuentro la inspiración que me genera creatividad". Las constantes peleas con Víctor Janeiro por el tema animalista fueron una constante, criticando que sea torero y haga sufrir a los toros. Ahora bien, uno de los momentos más divertidos del programa llegó con una confesión de la valenciana: "En mi casa vive el fantasma de Gustavo Adolfo Bécquer". El futurólogo Rappel intentó contactar con la presencia, dejando una escena por recordar.

Si Obregón fue la primera a hablar del programa, ahora ha sido Etxebarría quien se ha sincerado sobre una participación televisiva que califica de "ridícula". Lo ha hecho en un medio en la revista Allegramag, en dos artículos que ha escrito ella misma comentando cómo se ha sentido.

El primero lo publicó poco antes de que se emitiera el programa, adelantando que no estaba orgullosa del resultado: "Esta noche aparezco en Ven a cenar conmigo, en el que hice el ridículo más espantoso". Justificándose diciendo que perdió los nervios durante la grabación: "Me resultaba imposible cocinar con una cámara pegada en la cara y una persona dándome instrucciones pidiéndome que volviera a poner sal porque no había salido bien el plan. Las jornadas de rodaje eran larguísimas. Después me encuentro con que viene a cenar a casa un torero. De eso nadie me había avisado, por supuesto. Soy antitaurina de toda la vida. ¿Qué podía hacer? Había mucha tensión".

Pero si ha querido escribir todo esto ha sido para justificarse y explicar por qué aceptó esta invitación al programa: "Lo hice por dinero. A ver si os enteráis de una vez que trabajar en los medios está muy mal pagado. De las colaboraciones a mí no me quedan limpios ni 800 euros al mes. Y tengo que pagar al autónomo. De aquí a que haga cursos o que acceda a hacer estas cosas".

Y no tranquila con todo eso, ha decidido escribir un segundo artículo esta mañana, después de la resaca del programa. La escritora ha confesado que no lo vio, pero que tiene las redes sociales llenas de mensajes. Dando las gracias a la productora y poniendo por las nubes a Obregón y Rappel, también ha dejado escrito que en contra de Janeiro sólo tiene su profesión.

¿Cómo irán las siguientes entregas?