Las vacaciones escolares de Semana Santa ya han empezado. Los únicos que tienen 10 días de fiesta, entre el 24 de marzo y el 2 de abril, son los niños. Y los corruptos. Luís Bárcenas ya descansa en su lujosa residencia del Valle de Aran. La estación de Baqueira acostumbraba a reunir a la Familia Real y los que querían hacerles la pelota, como Duran y Lleida o Mar Flores. Ahora que Felipe VI prefiere esquiar fuera de Catalunya, en Huesca, sólo van a la estación catalana los que tienen casa, como el extesorero del PP. Pendiente de sentencia por el caso Gürtel y acusado en otros sumarios, sus abogados han tenido que avisar a la Audiencia Nacional que se movería de Madrid. Cada lunes tiene que comparecer en un juzgado para acreditar que no se ha fugado y el lunes lo hará en este pequeño juzgado de Vielha e Mijaran:
EFE
El excontable y exsenador del PP escribió de su puño y letra la mítica frase Eme punto Rajoy junto a una asignación de miles de euros no declarados. Los papeles de Bárcenas todavía se tienen que llevar a juicio y Luís tendrá tiempo de repasarlos en su casa de un millón de euros con garaje, dos plantas y buhardilla junto a las pistas de esquí. Puede recibir la visita de su hijo Willy, célebre vocal de la banda Taburete. En el sumario consta que su padre pagó 120 mil € para reformarla y las facturas las habría sufragado el PP, como consta en los juzgados. La urbanización es Val de Ruda y ofrece estas fotografías. Uno de los lujos más excesivos es que tiene acceso directo al teleférico:
Vanity Fair-Val de Ruda
De entre todas las imágenes, la más chocante es la última. Bárcenas puede hacer pis de pie mirando al valle nevado por la ventana inclinada de la buhardilla. Como si meara sobre todo el valle.