La selección española de fútbol ha empezado una nueva etapa. El estadio de la Rosaleda de Málaga fue el escenario del debut de Luis De la Fuente como seleccionador, cogiendo las riendas de Luis Enrique Martínez. La salida del asturiano fue muy triste, media España quería cortarle la cabeza. No le perdonan que sea insobornable, ingobernable y con un vínculo muy sólido con el F.C.Barcelona. Un cóctel explosivo: Lucho es un maestro navegando en ambientes hostiles, pero hay guerras que no se pueden ganar y ni siquiera valen la pena. Mejor decir basta y dedicarte a ser feliz, cosa que se merece con creces.
El Mundial de Catar supuso un esfuerzo titánico para el míster, y no solo por intentar conseguir éxitos para La Roja. Ha tenido que soportar campañas absolutamente despreciables, atacándolo por todas los flancos, incluso tocando la sagrada intimidad familiar. Fue realmente asqueroso. No así su réplica, impecable, humana, sensacional. Si han acabado con su etapa no ha sido por K.O., ni mucho menos. Hacen falta muchos soldados para tumbarlo, psicológica y físicamente. A sus 52 años es un titán. Y lo ha demostrado completando una proeza deportiva.
Luis Enrique aparca el balón y sube a la bici de montaña, su otra gran pasión
La otra gran pasión de Luis Enrique es el ciclismo y la bicicleta de montaña. Tiene miles y miles de kilómetros en las piernas, y lo que es todavía más encomiable: un espíritu de aventura y superación extraterrestre. Solo un loco adorable como él osa participar en una de las pruebas más duras del planeta, la Cape Epic que tiene lugar en Sudáfrica. 648 kilómetros de recorrido en 8 días, con un total de 15.475 metros de desnivel. Una locura. Lucho, acompañado por su equipo de incondicionales de la bici extrema, han conseguido llegar al final de la competición de una pieza. Hechos fosfatina, pero vivos, contentos, exultantes... y con un cuerpo de acero. Qué bestia.
Así han acabado las piernas de Luis Enrique en la Cape Epic, piernas de acero
La mejor prueba, la imagen que ha utilizado para reflejar el sufrimiento de su cuerpo a lo largo de la travesía africana sobre dos ruedas. Dos piernas de titanio, fibradísimas, alucinantes. Los calificativos se acaban para describir la escena. Mejor verlas y leer los comentarios de sus seguidores, que alucinan. Padre Luis Enrique.
Lucho, un fuera de serie. El mejor.