"Vaya, vaya, aquí no hay playa". ¿Recuerdan el estribillo de aquella famosa canción de The Refrescos del año 1989? Pues mira que ha llovido, y la cosa no cambia. Bien, en Madrid ahora tienen una, en el pantano de San Juan, pero en fin, que no. Que no es una playa de verdad. Y los madrileños y madrileñas que quieren hacer un bañito en el mar y tenderse en la arena para "ligar bronce", ya saben lo que les toca: "Carretera y manta". La mayoría, ya lo saben, invaden el litoral del País Valencià desde hace décadas. Están en tierra conquistada, y se comportan como fuerzas coloniales. De todo opinan, y muchas veces, haciendo gala de una ignorancia y una prepotencia que da pena. Un buen ejemplo: Lo que ha pasado en Dénia, en Alicante, frente a las cámaras de À Punt. Un joven venido de la capital se quejaba en directo del estado de la playa: "No me gusta. Mira la de mierda que hay", decía.
"Enchúfala con la cámara, que la limpie la Comunidad Valenciana", continuaba. Pero la "mierda" a la que se refería este simulacro de biólogo marino era, en realidad, una acumulación de posidonia en el litoral valenciano. El reportero que le entrevistaba fue rápido y contundente: "Hombre, eso son algas, eso no tiene nada que ver con la suciedad, eso es naturaleza. Eso es como cuando vas al monte y está lleno de maleza". La primera bofetada no hizo recapacitar al "dominguero", que insistía: "Hay playas que sí están limpias". El periodista se esforzaba: "A lo mejor vienes mañana y está limpia, eso se por las corrientes". La mujer/novia/rollete del máquina reía al fondo de la imagen, consciente (o no) del ridículo, que fue apoteósico cuando el reportero le remató: "En Madrid playas así no encontramos, ¿verdad?".
Los espectadores de la escena no podían sino aplaudir al periodista. Incluso se añadió el presentador del magazín À Punt Directe, mofándose del entrevistado: "Este chico es un experto". Un experto en tonterías. Al confundir la vegetación marina, tan necesaria para el ecosistema y en continua desaparición, con suciedad. Estamos apañados. Que se quede en la playa de Madrid. Y si no le gusta, que se lo explique al PP, aCs y a VOX.