Makoke ha vuelto a la primera línea del cotilleo de Telecinco. La exazafata del Telecupón, tertuliana y ex de Kiko Matamoros es como el anuncio del turrón, vuelve por Navidad. Llevaba tiempo más o menos desaparecida de la parrilla de Mediaset; los problemas judiciales, económicos y televisivos con su exmarido ya no interesaban. Tampoco su vida amorosa. Pero todo eso ha cambiado este fin de semana en el 'Deluxe' de Jorge Javier Vázquez, donde era prácticamente una proscrita. La malagueña se ha sometido a uno de los famosos polígrafos para contrastar la veracidad de sus historias y leyendas. Tiene unas cuantas: la primera, su edad. Dice que tiene 52 años, pero según nuestros cálculos son más. ¿Por qué? Por| el romance que dice que tuvo con Julio Iglesias. Sí su versión es cierta, se lió con el cantante siendo menor de edad. No puede ser. Los números no cuadran. Y la suma nos da 58. 6 más.
Otro episodio que suscita controversia e incredulidad es otra historia de amor con un megafamoso internacional, un VIP entre los VIPS de Hollywood: Brad Pitt. Makoke sostiene que cuando el actor visitó Madrid por el estreno de "7 semanas en el Tíbet" se quedó impactado con la belleza y simpatía de la colaboradora. Y la invitó a su habitación de hotel, donde resolvieron su tensión pasional. Una teoría que, según otras fuentes como la revista '¡Hola'!, es distinta. Cuando menos la protagonista: la escogida por Pitt fue Mar Saura, no Makoke. Hay fotos y portadas de aquel match. Pero nuestra protagonista no cambia de opinión, aunque el actor la acusó de mentirosa. Sostenella y no enmendalla.
Makoke, Brad Pitt y una historia de amor fracasado que causa incredulidad
Makoke fue interrogada por aquel affaire en el plató de Telecinco. La máquina de la verdad jugó a favor: "Dice la verdad", sentenciaba Conchita analizando sensores, gráficas y cableados. El empujón hizo que salieran a la luz más detalles de la historia: "el estreno fue el jueves y el viernes nos fuimos de fin de semana" como tortolitos. Ella le enseñaría España y alguna cosa más, claro. Se lo pasaron bien, "era muy simpático, encantador y súper romántico. Recuerdo que nos pusimos a bailar en esa habitación de hotel". Pero no cuajó la cosa. Y no porque el americano no quedara obnubilado por la azafata, ni mucho menos. Fue ella a la que no le convenció el plan. No se enamoró, de hecho rechazó la invitación a ir a visitarlo a Los Ángeles y pasar juntos el Fin de Año. "Me llamó dos o tres veces, a principios de diciembre. Le dije que no, me faltó química, me fui con él porque era Brad Pitt".
El "pa'luego" de Brad Pitt acabó con la pasión amorosa de Makoke
El relato de la andaluza era demasiado edulcorado, fantasioso. Allí hacía falta un poco de sustancia, de chicha. Piensen que hablamos del 'Deluxe', un matadero de intimidades de primera. Como Makoke no iba más allá, la tertuliana Lydia Lozano hizo el trabajo. Ella sabía por qué no funcionó, la protagonista le había explicado en alguna ocasión la intrahistoria. Y la verdad, la versión de asco. Brad Pitt, sucio. Sus dientes, en concreto. Resulta que la parejita pidió una pizza en su habitación para coger fuerzas, se la zamparon con ganas. Tantas que Brad no reparó en un trozo de dimensiones notables en su dentadura. Un pa'luego, vaya. El resto alimentario eclipsaba la visión de Makoke y hacía disminuir la llama del amor. Peor todavía con la resolución del incidente: Pitt se lo extrajo con un dedo. Una guarrada. Vete a saber qué hizo con aquel fragmento de pizza, acabaría en la moqueta. Normal que sexualmente tampoco quedara satisfecha, vaya imagen.
Son las historias por fascículos de Makoke. Historias para no dormir, como le pasó a ella con Brad Pitt. Ecs.