Albert Rivera ha dimitido como presidente de Ciudadanos y se va a su casa ("dejo la política"). Allí, en su casa, encontrará a Malú. La cantante no le dio apoyo en público la noche electoral que hundió al proyecto naranja. En las redes el último mensaje que colgó la pareja de Rivera es premonitorio y humillante para el político: un gato aburrido en la alfombra panza arriba sin hacer nada:
Només hi escriu "domingos", però no era el diumenge d'eleccions sinó l'anterior. Malú no ha tingut la precaució de penjar res més i el gat avorrit segueix allà, com a metàfora de tantes coses. Los lunes al sol.
Sólo escribe "domingos", pero no era el domingo de elecciones sino el anterior. Malú no ha tenido la precaución de colgar nada más y el gato aburrido sigue allí, como metáfora de tantas cosas. Los lunes al sol. Rivera en el adiós ha dicho "Me dedicaré a mi pareja, que ha estado a mi lado, aguantándolo todo". Rivera, quien no tiene trabajo, peina el gato.
Y para mayor burla, el gato es de color naranja.