Mar Flores es una leyenda del cotilleo español. Sus aventuras amorosas con famosos han llenado miles de páginas y portadas de revista. Algunas escandalosas, como aquella con Alessandro Lequio en Interviú compartido cama mientras le era infiel a Cayetano Martínez de Irujo. De eso hace ya una eternidad, como también del idilio con otro conde italiano: Carlo Costanzia di Costigliole. Fruto del romance nació su hijo Carlo Constanzia Jr., un tipo de 30 años con un físico exuberante y que levanta pasiones en su faceta de actor. El papel que interpretó en la serie 'Toy Boy' es el ejemplo más evidente: hacía de stripper gay, enseñando su anatomía con generosidad, cosa que agradecían sus fans. También hace sus pinitos como cantante de reguetón, donde no ha acabado de romperla a pesar de ir fuerte con las letras, muy subiditas.
La madre de la criatura, que actualmente vive en un ir y venir emocional con el multimillonario mexicano Elías Sacal, tiene el corazón en un puño. El futuro se presenta complicado, con turbulencias que podrían tener consecuencias muy graves. Carlo está abatido, angustiado, llorando por las esquinas. Concretamente las de un tribunal donde lo juzgan por un delito de estafa continuada. Le piden 9 años de prisión. Constanzia tenía un negocio con un socio, se dedicaban a la compraventa de coches de alta gama. Con truco, claro: los compradores no recibían nunca los vehículos por los cuales habían adelantado un 20% del importe. La Fiscalía pedía penas duras pero los abogados del actor, quien por cierto ha devuelto el dinero, confiaban en un acuerdo extrajudicial para cerrar el caso. Un hecho que, finalmente, no ha sido así.
Piden 9 años de prisión al hijo de Mar Flores, Carlos Constanzia, por estafa continuada
El juez tiene en cuenta que haya devuelto 160.000€, pero ha decretado que el juicio siga adelante. Según explica en Semana uno de los afectados, se trata de una estafa millonaria. El socio reconoció los hechos, mientras que el hijo del Mar argumentó que la culpa era de su colega, que era una víctima como los estafados. El problema es que la cuenta bancaria donde llegaban los pagos estaba a su nombre, entre otras particularidades. Y Carlo se ha hundido anímicamente, las perspectivas no son optimistas. Abandonó el juzgado "amargado, llorando desconsolado". Palabra de Constanzia: "Yo lo único que quería era demostrar a mi padre que podía tener mis propias ganancias, pero me he metido con las personas equivocadas".
La reacción del guapísimo Constanzia: abatido, llorando y enviándose mensajes de autoayuda
El caso continuará ahora en otro tribunal con un nuevo magistrado, que podría atender a sus explicaciones o destrozarlo definitivamente. 9 años de prisión es una petición muy importante, el hombre no está preparado para enfrentarse a una situación así. Intenta consolarse y animarse, se envía mensajes de autoayuda y reivindicación, que no de arrepentimiento. Ayer mismo decía esto en las redes, un galimatías que ha encontrado en Internet: "Eres mucho más de lo que crees. El mayor riesgo como decía Michelangelo Buonarroti no es que apuntemos muy alto y fracasemos, si no que apuntemos muy bajo y triunfemos. Destacar no ha de ser un objetivo si no la consecuencia de vivir de acuerdo a quien realmente eres. Que cada mañana te preguntes que es lo que realmente quieres, porqué lo quieres y como lo quieres y vayas a por ello". Debe ser que todavía está en shock, porque como análisis no convence. Solo a su madre, que lo aplaude.
La madre, expectante, sufriendo, temblando. Mar Flores podría tener un hijo convicto. El más guapo de la cárcel, eso sí.