"Vamos a Barcelona, violencia en la calle y los asesinatos se repiten...atemorizando a los vecinos" (pronunciado con el tono grave de sonsonete de Telecinco). Hay un nuevo presentador catalán en España: Marc Calderó. El joven periodista nacido en Barcelona hace 30 años ha tenido una carrera meteórica en TV: de becario en Betevé a presentador y editor del informativo del fin de semana en 8tv a las órdenes de Josep Cuní hasta llegar a Telecinco. Ha sido reportero de El programa de AR hasta que la misma productora puso en marcha Ya es mediodía donde desde este lunes sustituye a Sonsóles Ónega como presentador durante el verano. El debut mantuvo la audiencia en un correcto 11,4%.
Debut agridulce: su telegenia y dotes de comunicador han evitado la imagen de novato conduciendo un programa estatal. Buenas tablas que no han eclipsado la porquería de contenido que le han hecho presentar: Barcelona ciudad de chorizos, camellos y prostitutas. Un tono telecinquero que durante media hora ha pretendido hundir la imagen de la capital catalana en plenas vacaciones, cuando los turistas tienen que decidir si van de visita. Se sucedían imágenes de hurtos, peleas y conflicto en la calle y los tertulianos de la ultraderecha hundían a Barcelona, por indepe y por colauita.
La violencia se adueña de las calles: ya se han cometido 5 homicidios, en plena calle, en el mes de julio #YaEsMediodía284 > https://t.co/4RSiveXY7H pic.twitter.com/01EowOENh3
— Ya se mediodía (@yaesmediodiatv) 29 de julio de 2019
Calderó ya apareció con Ana Rosa Quintana cuando se hizo el Consejo de ministros en Barcelona y AR ofrecía una imagen de Barcelona ciudad criminal: "batalla campal, vuelan las piedras, no hemos ido a inmolarnos", y el reportero mostraba piedras a cámara. Ahora no ha impedido que los tertulianos ultras en mayoría, como Benjamín López o Javier Negre ("Ves MENAS delinquiendo y hay mano bñanda de las autoridades"), los vídeos y el tono general del programa fuera un publirreportaje contra Barcelona. Así lo ha visto la red, empezando por una vecina que no vota ni a Colau ni a los independentistas, Pilar Eyre:
No entiendo que interés hay en @telecincoes para llevar media hora vituperando a Barcelona de una forma brutal: violencia, ciudad sin ley... me causa tristeza, rabia, impotencia... que os hemos hecho @yaesmediodiatv ?
— Pilar Eyre (@pilareyre) 29 de julio de 2019
La imagen que T5 y A3 transmiten de Barcelona es que ésta es la mezcla del Beirut de los 80 con el Chicago de los años 20.
— JAUME (@Yeagov_CAT) 29 de julio de 2019
Hace unos veranos los medios descubrieron que había prostitutas en el Raval, cuando cualquiera que conozca la zona sabe que han existido siempre.
Catalanofobia, Pilar.
— Sandibel (@Sandibel74) 29 de julio de 2019
Ahora te das cuenta del odio de estas cadenas hacia Catalunya?
— LlVis V (@lluitadorcat) 29 de julio de 2019
Telecirco lleva semanas concentrándose en el desprestigio de todo lo barcelonés y, por extensión, lo catalán. Cuando la mafia hace eso hay que buscar cual es el botín.
— Única sentencia válida: ABSOLUCIÓN!!! ���� (@JmSnts) 29 de julio de 2019
T5 es una crónica de sucesos permanante y permanentemente teledirigida
Barcelona es ETA
— CNI TERRORISTA (BS) (@masvismailow) 29 de julio de 2019
Calderó se ha visto superado por la acritud de los tertulianos que querían hundir a Barcelona con afirmaciones del tipo "Qué vas a esperar de una alcaldesa que ha sido okupa". Ada Colau formaba parte de la PAH, plataforma de los afectados por las hipotecas. Telecinco pierde los papeles con Catalunya y Marc Calderó debuta con mal pie mientras la revista Lecturas especula sobre su vida privada: "Reservado y discreto respecto a su vida privada, tan solo deja claro su amor por los animales en sus redes sociales. Calderó se derrite con su perrito Bruno, toda una estrella también en cada una de las fotografías que comparte con él".
El futuro de Telecinco pasa por caras como las del barcelonés Marc Calderó. No dirige los contenidos del programa que presenta de la productora de El programa de Ana Rosa pero ya sabe cómo va en Madrid si quieres triunfar: caña al procés, a Colau y a Catalunya.