El secreto para ganar títulos y ser un buen deportista es estar bien dentro y fuera de las competiciones, y no hablamos de estar en forma y preparado para todos los retos deportivos, nos referimos a estar bien cuando los focos se apagan y toca irte a casa. Quien puede presumir de haber estado siempre muy bien rodeado y de estar en su mejor momento es, sin duda, Marc Márquez. El piloto de MotoGP de Cervera siempre tiene una carcajada para las cámaras, pero ahora sonríe con más fuerza que nunca después de esta gran temporada con su hermano Àlex Márquez cerca, y también de tener a Gemma Pinto cerca, su novia que lo acompaña en todas sus competiciones. A Marc Márquez le brillan los ojos cada vez que habla de su hermano, su novia o algún miembro de su familia, y recientemente ha dedicado unas palabras preciosas para un miembro de su familia que ya no está: su abuelo Ramón. Atentos.
Los hermanos Márquez-Alentà tuvieron que despedirse de su abuelo Ramón hace más de un año, concretamente, el pasado 4 de febrero del 2024, cuando vimos que los dos pilotos se unían en una publicación de Instagram para anunciar la noticia con una recopilación de imágenes donde los podíamos ver en los tres juntos en un banco de su pueblo, jugando al dominó e incluso haciendo videollamada. Una relación de abuelos y nietos bonitísima que también pudimos intuir a través de las palabras de los dos hermanos: "Muchas gracias por todo lo que nos has cuidado y enseñado abuelo. Descansa en pau, T’ESTIMEM AVI" Ya hace más de un año de su muerte, pero, ahora, a unos días de ver a Marc Márquez corriente en Jerez en el Gran Premio Estrella Galicia 0,0 como líder de la clasificación, ha concedido una entrevista a Vanitatis donde ha hecho un repaso de todos los pilares de su vida y, claramente, ha mencionado a su abuelo Ramón.
Durante la entrevista escrita en el medio digital, Marc Márquez habla de la familia y se pueden ver imágenes de su infancia con su hermano, su padre o su madre, y también ha querido recordar la figura de sus abuelos, concretamente la del abuelo Ramón: "Le echamos muchísimo de menos. Me encantaban las conversaciones con él. Tenía por costumbre hacernos una visita obligatoria antes y después de cada carrera" Aparte de ser un gran apoyo, también era un aficionado y los daba los mejores consejos: "Nos hablaba de estrategia, de cómo había visto el fin de semana. Cogía a mi hermano y a mí y nos decía todo lo que pensaba, sin filtros. Y como era el abuelo, uno simplemente callaba y escuchaba. Si lo entendías, bien; y si no, también" explica a Vanitatis. Sin embargo, lo que más hace emocionar de sus palabras es recordar unas de las claras intenciones que tenía su abuelo antes de morir.
Marc Márquez toca la fibra cuando recuerda lo siguiente: "Siempre decía que lo único que quería era llegar a los noventa y tres años, porque es mi número. Falleció justo a los noventa y dos" El señor Ramón no pudo cumplir su promesa, pero siempre llevaba el número de sus nietos con él. De hecho, en la fotografía que publicaron vía Instagram para despedirse podemos ver que el abuelo presume de gorra donde se podían ver los dos números de los hermanos: el 93 y el 73. Un vínculo entre abuelo y nietos que perdurará para siempre en el recuerdo.