El mundo se acaba, señoras y señores. No estamos hablando de la llegada de ninguna profecía, ni de una invasión extraterrestre, ni de una alerta de cataclismo telúrico. No. La razón es una evidencia mucho más clara y definitiva. Lucifer ha ganado la partida a Dios, y se ha encarnado en la figura del pontífice, la representación de la divinidad en la tierra: El Papa Francisco, para más señas, que ni es ni Papa ni nada, según el periodista catalán Paco Marhuenda. Lo que realmente es Jorge Mario Bergoglio es un peligroso antiespañol que ha nombrado como arzobispo de Tarragona a Joan Planellas, que se atrevió a calificar como "un drama" la existencia de presos políticos en España. Qué blasfemia. El Papa es antiespañol, amigo de los independentistas, "izquierdoso y acomplejado". Y un ingrato con España, seguramente lo peor que se puede ser en el atribulado mundo de Marhuenda, ya que este país es "el última bastión del catolicismo en el mundo".

Puede escuchar a Paco Marhuenda a partir del minuto 51:00:

@spainaddiction

Marhuenda compartía estas revelaciones (que seguramente no se hubiera atrevido a realizar en otros tiempos) con el sus colegas de terapia ultra: Federico Jiménez Losantos y Eduardo Inda, que aclamaban su afilado discurso antipapal. "Peronista, pero de izquierdas, de los de Kirchner", para diferenciarlos de los de derechas, que son los buenos, claro está. La opinión del de La Razón se añade así al tuit de Alejo Vidal Quadras, uno de los creadores de VOX, que también acusaba a Francisco de indepe por unas declaraciones del pasado mes de marzo en las que Bergoglio rechazaba visitar España "hasta que no haya paz". La verdadera constatación de que el mal se ha apoderado del Vaticano. Marhuenda, consciente de que su intervención necesitaba todavía más resonancia (quizás no se fía de la audiencia de Losantos), lo repetía en las redes sociales, haciendo enloquecer a los internautas de un lado y el otro.

Elcomercio.pe

Como han cambiado las cosas. Los defensores acérrimos de la España ultracatólica tienen que ver cómo el demonio independentista ha robado el cuerpo y el alma de su líder espiritual, y no se cortan a la hora de denunciarlo. Es coger un micro y juntar al Papa con términos como Catalunya, independencia, presos, ETA, izquierdoso y peronista, y ya han hecho el día. ¡Ah! Y "caca de paloma", que de aquí ha nacido la denuncia de Marhuenda. No temen la cólera de Dios, ni la de su representación terrenal. ¿Qué será lo siguiente? El fin se acerca. Que Dios nos pille confesados, Paco.