Ya os lo advertíamos, después de los alborotos de los VIPS más populares, llegaban las de sus hijos. El fenómeno de los nepobabies es una realidad, el talento para enredarse en el mundo de la televisión se hereda de generación con generación. Solo hay que mirar el abanico de personajes y jóvenes que son portadas: Alejandra Rubio, hija de Terelu Campos, a la cual juraba y perjuraba que no trabajaría de la televisión, ahora se ha convertido en portada de muchas revistas a raíz de su relación con Carlo Costanzia, hijo de Mar Flores. Hay otras que no son tan polémicas, como Anita Matamoros y Ana Ferrer Padilla, sin embargo, también han optado por vivir de la exposición de sus apellidos. Ayer, entre toda esta lista de nepobabies, se sumaba al bando de la polémica, la noticia bomba sobre Juls Janeiro, hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario.
Para si llevar este apellido, y ser hermana de Andreíta, la hija de Belén Esteban y Jesulín no fuera un buen impulso para ser conocida y causar la polémica, Juls Janeiro nos dejaba en todos boquiabiertos. Hace tan solo unos días que estallaba un nuevo revuelo para la familia Costanzia: Pietro y Rocco, dos hermanos de Carlo Costanzia (por parte de padre), estaban detenidos por intento de asesinato en Italia. Todo el mundo se quedaba de piedra al conocer la noticia, pero parecía que este caso, solo salpicaba a la familia italiana, los dos personajes no tenían ningún vínculo con el panorama español. Pues bien, estábamos equivocados. Tan solo un día más tarde, Luis Pliego, director de Lecturas, destapaba en exclusiva el romance entre Juls Janeiro y Pietro, uno de los protagonistas. Una relación tempestuosa, con altibajos, y ahora, además, un problema judicial por el medio. Jesulín se estiraba el pelo por momentos.
La noticia se extendía como la pólvora, y en horas, la revista Lecturas daba más detalles de la relación entre los dos jóvenes. Los colocaba en portada con una fotografía inédita de la parejita. Aseguraban que no se trata de un rollo de una noche, que habían estado a un paso de la relación, tenían encuentros esporádicos en diferentes rincones del mundo. Coincidiendo desde Marbella, Barcelona o incluso en Turín y Milán, donde la joven habría viajado solo para verlo. Juls Janeiro nos lo iba enseñando todo por la red, pero hasta ahora no habíamos conocido el motivo de tanto viaje y tanto avión: los brazos del joven italiano. Ella tampoco se escondía, es más, tiene el Instagram público, donde enseña sus looks, maquillajes, viajes, y poca cosa más. Empezaba como un personaje misterioso, pero ahora está más activa que nunca en las redes, para la prensa del corazón ya es toda una influencer. Pero quien parece que no está demasiado de acuerdo con su popularidad es otra protagonista de toda esta trama, hasta ahora más apartada, su madre, María José Campanario.
La mujer de Jesulín y archienemiga de Belén Esteban sacaba las garras por su hija a raíz de la portada de la revista Lecturas. Estaría tan en desacuerdo que la imagen de su hija estuviera publicada, que habría tomado medidas legales, así lo comunicaba por Threads. "Para los fotógrafos y medios de comunicación que aún no se hayan enterado. Mis hijos son personas anónimas porque así lo ha dictado un juez.(...) Dicho esto nos vemos en la obligación de comunicar que seguiremos interponiendo las correspondientes demandas que sean oportunas" María José Campanario, se escandalizaba por la publicación de una información de su hija, a la cual quiere mantener anónima, pero cuenta con un perfil abierto en las redes sociales y con miles de seguidores. Incoherencia absoluta, si quisiera mantener el anonimato de sus hijos, primero haría falta consultarlo con ellos primero y ponerse de acuerdo.
"Venga, hasta luego. Quién avisa no es traidor, es avisador. Luego no se me quejen y tal..." No le falta mal genio, ni carácter para salir en defensa de los suyos. Lo único que le falta es tener argumentos de peso, reclamar el anonimato de tu hija cuando esta cuenta con 211 000 seguidores que la siguen diariamente, no tiene ningún tipo de sentido.