María Patiño ya es un icono pop en toda regla. Dicharachera y sobreimplicada sea en sus facetas de colaboradora y presentadora, siente el oficio muy suyo y lo ha demostrado siempre que ha podido. Después de cerrar una larga etapa en el plantel de tertulianos de ¿Dónde estás corazón? en Antena 3 y otra aún más longeva en las sobremesas de Telecinco con Sálvame y sus mil y una variantes, a Patiño solo le queda en pantalla el papel de conductora de Socialité. Indudablemente, estamos hablando de una mujer con una trayectoria dilatadísima dentro del periodismo y con mucha historia que contar. Es por eso que la que un día fuese su compañera —e incluso directora— de programa, Carlota Corredera, la ha invitado a Superlativas, su pódcast de éxito, para charlar a fondo con ella en un momento en el que Patiño rehúye las entrevistas en medios convencionales.
Una relación complicada con la entrevistadora
Divertida y muy natural, lejos queda ya la imagen de aquella María Patiño con la hemeroteca en la mano que en sus inicios procuraba siempre lucir la más profesional, y así lo ha demostrado en el programa de Corredera que tanto está dando que hablar. En él, entrevistada y entrevistadora han querido aclarar cómo es su relación personal, ya que en los últimos meses de la de Vigo como presentadora del formato de La Fábrica de la Tele, tuvieron más de un desencuentro. "Recuerdo tener una distancia contigo, porque hasta me molestaba tu presencia porque ya viene aquí la lista de la clase", confiesa Patiño.
La génesis de sus disputas venía, en gran parte, por el revuelo provocado por la emisión del documental Rocío: contar la verdad para seguir viva. Hito de la televisión para con la exposición del machismo y otras cuestiones hasta entonces silenciadas como el ejercicio de la violencia vicaria en el que, precisamente, Carlota Corredera terminó por tomar un rol principal como portavoz del discurso feminista. María Patiño la acabó comprendiendo, como ella misma explica durante la entrevista, pero sí le costó aceptar que la que hasta entonces había sido una compañera más le cuestionase cosas tan primarias y arraigadas como si su educación era machista o no. Aun con todo esto, las dos comunicadoras gallegas mantienen ahora una muy buena relación y se alegran de haber podido limar asperezas tras lo sucedido.
La impactante adicción que le han diagnosticado a María Patiño
A lo largo del episodio del pódcast, que dura una hora, han tenido la oportunidad de tocar muchos palos. Uno de los más sorprendentes: María Patiño confiesa que le han diagnosticado una adicción. “No he sido consciente de todo lo que he vivido (...). Me decían: ¿quieres hacer esto? Sí. ¿Quieres subir a este proyecto? Sí. Hacía de todo sin pararme a pensar, sin pararme a reflexionar”, admite sobre cuanto le ha costado oponerse a las oportunidades laborales. A la pregunta "¿has llegado a ser adicta al trabajo?", la respuesta es contundente: “sí, de hecho, me lo han diagnosticado”. Inclusive, expone cuanto le cuesta desconectar en las vacaciones, siendo incapaz de no estar pendiente de la actualidad.
Sobre el futuro próximo, tiene claro su mayor miedo: "trabajar por dinero" y "no sentirme ilusionada, dejar de creer en mí misma, apagarme". Si es que ella lo único que necesita es que le pongan eso de No dejes de soñar y cantar bien alto las letras de Manuel Carrasco para sentirse viva.