Que los famosos y famosas se sometan a operaciones y retoques estéticos no sorprende a nadie. Como mucho, lo que llama la atención son los resultados de intervenciones y tratamientos diversos. Los objetivos acostumbran a ser siempre los mismos: lucir más atractivos y, sobre todo, más jóvenes. Arrugas, pómulos, labios, orejas, papadas, pechos, pelo, lipoesculturas... el abanico es amplio, las posibilidades infinitas. De hecho, hay algunas remodelaciones que son imperceptibles para el gran público. Normal, forman parte de la más estricta intimidad de los protagonistas. Es el caso de la presentadora navarra Mariló Montero, que ha confesado haberse hecho un retoque muy sorprendente y desconocido.
Montero, de 58 años, vuelve a estar sin programa en televisión. Empezó el año en el 'Todo es mentira' de Cuatro, haciendo pareja con Risto Mejide. Incluso le dieron las campanadas de Fin de Año, firmando la retransmisión menos vista de Mediaset. Un fracaso absoluto. Después del porrazo desapareció de circulación, gracias también a la fulgurante reincorporación de Marta Flich, que había sido madre poco tiempo antes. La comunicadora se quedaba únicamente con su participación en 'El desafío' de Antena 3 como concursante y poca cosa más. Entre ellas, sus promociones, es una mujer anuncio. Una de las empresas para la que trabaja como imagen es un centro especializado en tratamientos con láser. ¿De qué tipo? Esta es la clave.
Mínimo histórico para las campanadas de Mediaset
— M ���� (@casasola_89) January 2, 2023
En Cuatro, las campanadas anotan un paupérrimo y pírrico 1,6% con 250.000 espectadores.
Ibai en twitch, duplicó a las campanadas de Mariló y Risto Mejide #Audiencias

Hablamos de la aplicación de nuevos modelos de láser en terapias vaginales de una empresa y una tecnología de la cual la exmujer de Carlos Herrera es madrina en España. Una de las aplicaciones es el rejuvenecimiento de la zona íntima femenina, cosa que Montero asegura haber puesto en práctica en su anatomía. Después de dos hijos, Antonio Herrera y Rocío Crusset, y de sufrir la menopausia, Montero decidió hacerse este retoque aprovechando su relación empresarial. Según asegura, es sencillo, rápido y efectivo. Evidentemente, si lo haces con sus patrones, claro. Siempre barriendo hacia casa, no es lista ni ná.

Montero, siempre la mejor, la vida en rosa: "Tengo la menopausia desde hace varios años y no me he enterado de nada. No me he dado sofocos ni he tenido ningún síntoma. Soy muy afortunada en ese aspecto". Anima a las mujeres de su generación a emularla, porque "tardas más en quitarte y ponerte la ropa que en el tratamiento en sí. No requiere ningún tipo de ingreso". Si lo que anuncia es verosímil al 100%, las complicadas operaciones y procesos que se tenían que sufrir para obtener resultados similares son historia. La marca, presente en todos los países del mundo, parece de garantías. Ahora bien, la proporción entre literatura, marketing y verdad en el relato de Mariló queda en la conciencia de la empresa y de su VIP.
