'Eufòria', el programa denunciado por Mainat por supuestamente ser un plagio de Operación Triunfo, fue un éxito en su anterior edición. Los finalistas fueron Triquell, Núria y Mariona Escoda y esta última resultó la ganadora. En su momento se hizo muchas entrevistas. Un buen tour que, un año después, completa con éxito con una buena entrevista en RAC1. Lo ha entrevistado otro ganador, en este caso de los premios Ondas, Jordi Basté. Vale la pena y hay que escucharla entera. Si quieres hacerlo, escúchala aquí, pero nosotros te damos los highlights, los flashes.
Ahora, Mariona ha sacado a un nuevo single que se llama 'Et deixo la mà' y en el que se vacía emocionalmente. En el videoclip de este nuevo tema aparecen, además de ella, una chica y una niña que representan su yo de cuando era pequeña. "Todo eso tiene un significado", empieza explicando Mariona descifrando que con 'Et dexo la mà', ella quiere romper con todo aquello del pasado que no la dejaba avanzar "no solo artísticamente, sino como persona". Todo eso va mucho más allá y la reconversión de Mariona, que sufría de muchas inseguridades, fue posible gracias a su psicóloga, con quien empezó a trabajar antes del estallido de Eufòria.
La clave: la terapia
"Antes de entrar en Eufòria ya hacía tiempo que iba al psicólogo. Yo soy muy analítica y tenía muchos patrones internos que tenía que cambiar. Yo era una persona muy insegura y Eufòria me ayudó a romper con todo eso. Me costaba mucho sociabilizar, creer en mí misma...", ha reflexionado la artista con Basté. Unas declaraciones que son dignas de admiración: pues hoy en día todavía es difícil reconocer que vas a terapia. El cerebro es un músculo más a entrenar: igual que vas al gimnasio a ponerte fuertote/a, el psicólogo te puede ayudar a mejorar tu autoestima. ¡Bravo, Mariona!
Adiós Twitter
La ganadora de Eufòria, seguramente siguiendo los consejos de su psicóloga, sabía que si estaba muy pendiente de las redes sociales, se acabaría hundiendo. Las críticas afectan a cualquier mortal y más si este participa en un concurso tan seguido como 'Eufòria'. Fue entonces cuando Escoda tomó la decisión de desinstalarse la aplicación de Twitter de su teléfono móvil. "No quería estar cada semana después de cada gala mirando qué se decía de mí. Mucha gente me criticaría sin saber lo que costaba hacer cada actuación en el escenario", revela. De hecho, dice que entró en un par de ocasiones durante la emisión del programa y recordó, entonces, "por qué no lo tenía que mirar": Una decisión sabia la de borrarse Twitter. Y es que es bien cierto: es una red social que, si no la sabes dominar con cabeza fría y corazón caliente -como diría Artur Mas-, te puede venir muy grande.