Maruja Torres tiene 81 años y si siempre ha dicho lo que le ha dado la gana, ahora todavía más. La periodista y escritora catalana nació y ha vivido muchos años en el Raval, en el corazón de Barcelona, pero hace un tiempo tomó una decisión que muchos no entendieron: dejar su piso en Barcelona, su ciudad, para irse a vivir a Madrid. No fue una decisión técnica por motivos laborales como por ejemplo hizo Marc Màrquez. Maruja Torres abandonó Barcelona y Catalunya, dice, de mala gana, por motivos políticos. Culpa a los independentistas y carga duramente contra Puigdemont en una entrevista de promoción de su último libro.
El periodista de El Confidencial, digital anti-indepe, hurga a Maruja sobre este "exilio" madrileño para ver si la periodista carga contra el procés. Bingo. Maruja Torres: ""Me marché de Barcelona harta del independentismo. Me fui porque me aburría como una mona con el monotema. Pero a donde quiera que voy me sigue la circunstancia. Me fui de Barcelona para no tener que hablar en voz baja de mis ideas en los restaurantes". El sonsonete de que el procés rompe familias y hogares, aunque sean hogares unipersonales. Que tenía que hablar bajito en los restaurantes si quería criticar el procés. Antes de cambiar de restaurantes cambió la ciudad de su vida. Contra Puigdemont es todavía más ácida.
Torres y su habitual tono mordaz ahora contra Carles Puigdemont: "Estoy a favor de la vaselina, de la amnistía. ¿Qué vamos a hacer? ¿Tener una guerra civil? Prefiero la vaselina. Y luego que carioco, el escapista, ponga un circo. Yo aprovecharía esa capacidad suya para hacer un número circense: el hombre que desaparece. Carioco es un personaje así, alguien que yo creo que ya ha hecho bastante daño. El independentismo en Cataluña existirá siempre, pero a ver si por lo menos se controlan un poco y hacen por ejemplo como el País Vasco, al que le están saliendo bien las cosas. Y a mí que me dejen tranquila los años que me quedan". Los intelectuales de izquierdas siempre pensando en la guerra civil, haciendo libros, pelis o viéndola en Cataluña.
¿Qué hace una feminista de izquierdas escogiendo el Madrid de Ayuso para vivir? Pues fue una mala elección: "El proceso de fascistización de Madrid, de trumpización, está logrando que cada vez tengas menos espacio público. Madrid se está convirtiendo en una ciudad inhóspita, llena de coches y de humo, en la que los bancos para sentarse los viejos en la calle desaparecen de todos los barrios menos del de Salamanca… Y luego están muy crecidos. Cuando vas a un buen restaurante, y yo a veces voy, te puedes encontrar con Bárcenas. Yo estoy pensando en venirme a vivir a Oviedo. Asturias tiene el tamaño del Líbano tiene mar y montaña cerca, puedes ir a una y a otra en el mismo día...". Como Girona, pero claro, es Cataluña y eso sí que no.