'Masterchef' es un programa con trampa. Lo venden como un concurso culinario para toda la familia, blanco, neutro. Creado, diseñado y ejecutado con el único objetivo de entretener a través de los fogones, del aprendizaje y la superación. Ojalá. Todo está pactado y guionizado al máximo, no hay nada al azar. Sin embargo, la manipulación no se queda solo aquí, no. También hay carga ideológica. No lo pueden evitar. Normal si repasas el elenco de jurados estrella, o determinados concursantes VIP entronizados por el show. Samantha Vallejo Nágera, la nieta del Mengele español. Pepe Rodríguez, un patriota manchego campechano, como tiene que ser. Y Jordi Cruz, la cuota catalana que gusta en la Madrid de Ayuso. Un sentimiento recíproco, público y notorio. La presidenta madrileña visita regularmente las cocinas del talent cuando toca hacer autobombo, y sabe que siempre tendrá una alfombra roja a su disposición. Con eso y los toques de Tamara Falcó o Mario Vaquerizo, la coral resultante es un cuadro.
Pero para cuadro, lo que veremos (o no) a partir de esta noche en TVE, con un capítulo que ni las mentes más maquiavélicas hubieran diseñado mejor. La semana del aniversario del 1-O, en plena tormenta por la amnistía, los votos de Carles Puigdemont, etcétera, 'Masterchef' se saca de la manga un programa dedicado a los anticatalanes número 1. A los del 'a por ellos', los Piolines, los de los porrazos a votantes. A la Policía Nacional española y, más concretamente, a los antidisturbios. Cuando menos eso es de lo que se jacta la mismísima policía en redes sociales, ofreciendo una imagen escalofriante en redes.
La foto funciona como un producto para adelgazar sensacional, el hambre se evapora. Tipos uniformados, con cascos, porras, postura desafiante... qué dolor de barriga. El texto tampoco está nada mal, sobre todo desde el punto de vista sintáctico o en cuestiones de lenguaje virtual. "Tranquilos jueces de @MasterChef_es los platos están bien custodiados. Esta noche a las 22:30 no te puedes perder el programa en @rtve. Nuestros #alumnos junto a sus profesores de la @PoliciaEscuela probarán el menú que preparan los concursantes". Ni una coma, tú. Y los puntos los hemos añadido nosotros. Ah, sí, y no entendemos muy bien eso del hashtag 'alumnos'. ¿Algún experto en la sala? En la policía, ni en su escuela, hay ninguno. Gracias. Antonio Baños alucina.
El resto de reacciones van en la misma línea, incluso la traspasan. El rechazo es la tónica general, pero también el sarcasmo. 'Masterchef' se supera. Ya tienen el capítulo más anticatalán de su historia, y de largo.