"Tendrán que venir a dar explicaciones todas las personas responsables estos meses, entre ellas el señor Millo, que ha sido el mayordomo, que ha aplicado el 155 en Catalunya". Fueron palabras del portavoz de JuntsxCat en el Parlament, Albert Batet, cuando se citó al exdelegado del Gobierno, Enric Millo, a comparecer para dar explicaciones sobre la aplicación del 155 en una comisión de investigación. Este martes Millo ha vuelto a comparecer para dar su punto de vista. Esta vez en el Tribunal Supremo, en el marco del juicio al procés.

"Que me llamen mayordomo o virrey no es lo más grave que me dicen", le reconoció poco después él mismo a Mònica Terribas en Els matins de Catalunya Ràdio. Pero es un apodo que ya se le ha quedado, con algunos mensajes rotundos hacia su servilismo con altas instancias españolas, como el que le dedicó Xavier Sala-i-Martin:

El recital de Millo en la Sala del TC es de los que por mucho que fuera esperado, provocaba vergüenza ajena. "No se puede negar que algunos CDR son violentos", "Los policías caían en la trampa del Fairy que se trataba de poner detergente en la entrada de los colegios a fin de que patinaran en la entrada y cuando estaban en el suelo les picaban la cabeza con los pies" o "los defensores de los colegios utilizaron artes marciales para el golpear el cogote de los policías". Millo ha seguido la línea de sus superiores en España y del secretario de Estado de seguridad al perjurar que la violencia policial se hubiera podido evitar si no se hubiera convocado el referéndum. Referendum indepe caca que hay que limpiar con Fairy. ¿Asumir responsabilidades sobre las cargas desproporcionadas? Ni una.

Su intervención está siendo sobradamente comentada en las redes desde de buena mañana. En un tono severo y contundente, como el de Pilar Rahola, que ha escrito que "las mentiras de Millo, el juego sucio de Millo..., no se encuentra en el idioma, con bastante precisión, lo que pienso de este personaje. Única función de Enric Millo hoy en el Supremo: ir a hacer daño, todo el daño que pueda". Ha habido, sin embargo, un recordatorio sarcástico con su talante. Avalancha de memes destacando, precisamente, que si en el futuro quiere dedicarse a la honorable tarea de hacer de mayordomo, que tiemblen los profesionales del sector que se llevará el trabajo de calle. Todos los mayordomos de la tele y el cine han quedado customizados con su cara:

Parafraseando a uno de los mayordomos clásicos de los anuncios, "El algodón no engaña".... Ni Enric Millo tampoco, por mucho que haya testificado en el Supremo escenificando Catalunya como un país apocalíptico.