La Sexta ha estrenado el sustituto de Cristina Pardo y su 'Liarla Pardo': ahora la franja de sobremesa del domingos es propiedad de Nuria Roca y 'La Roca'. La verdad es que la cadena de Atresmedia no se ha roto los cuernos con el título del espacio. Tampoco con sus contenidos: la sensación de "esto ya lo he visto antes" monopolizó el primer capítulo: colaboradores como Gonzaló Miró o su marido, Juan del Val, y entrevistados como Pablo Motos, Carlos Latre y Mercedes Milá. Es bastante difícil innovar con estos ingredientes, y el resultado fue discreto, anodino e irrelevante. Especialmente en cuanto a audiencia, con un triste 4'6%.
El recibimiento de los espectadores en las redes sociales tampoco es para echar cohetes. Más bien el resultado es para esconderse. "Coñazo", "tostón"... el veredicto popular no ha tenido piedad del primer día de Roca y compañía, quizás porque se suponía que sería un programa rompedor y entretenido. Pues no demasiado, la verdad. Más bien era la excusa perfecta para echarse la siesta después de comer.
El momento más valioso llegó precisamente durante la entrevista a Mercedes, que está a punto de estrenar el nuevo 'Milá vs Milá' en Movistar+. La de Esplugues de Llobregat siempre da juego, especialmente cuando se pone brava y reparte a diestro y siniestro. Es lo que hizo desde primera hora: al conectar dejaba una pulla indiscutible, "habría que abreviar, ir a buscar la calle y teorizar menos", y finalmente desmenuzó el espacio y a la presentadora harta del desbarajuste que estaba viviendo durante la conexión desde Menorca, donde la periodista tiene fijada su residencia. Desbarajuste técnico, concretamente. Era casi imposible seguir la conversación con normalidad. El retorno era interminable, y Milá de mecha corta.
Después de sufrir silencios y pausas interminables y nada televisivas, Milá reventaba y las soltaba fiel a su estilo: zascas elegantes pero con mano de hierro: "Me dejáis en un silencio como las tumbas de Tutankamón que no se si está cortada la voz y ya no hay nada que hacer, o no os interesa nada de lo que digo, porque hay un silencio como de muerte". Roca intentaba poner cara 'de aquí no pasa nada' e intentaba calmar a su invitada, consciente de que el repaso sólo podía ir a peor. Se excusaba por los inconvenientes y aseguraba que todo lo que decía era interesantísimo, pero no la convencía. El segundo puñetazo fue de campeona de los pesos pesados: "Escucha, pero esto lo tenéis que arreglar criatura. En Antena 3 que vais por delante además mucho más". Bien, es lo único en la que se equivocaba Mercedes: ni 'La Roca' se emite en Antena 3 ni, evidentemente, este programa será líder en su vida. Ya le gustaría...
Esta 'Roca' parece de arena: se deshace al mínimo contacto. O cambia mucho la cosa o su sentencia ya está escrita. Y no será recibir un Ondas, no...