Mercedes Milá está siendo protagonista de la actualidad de esta semana. Después de dos años sin presentar ningún programa de televisión, concedió una entrevista a Jordi Évole de la que se ha hablado mucho. Salvados la tuvo a ella como protagonista este domingo, abriéndose en canal y sincerándose como nunca. No se le conoce por tener pelos en la lengua, precisamente, pero en esta última ocasión criticó a todo el mundo.

Una de las bombas llegó cuando explicaba que una depresión le apartó de Gran Hermano. La presentadora estuvo más de una década al frente, pero decidió dejarlo al no poder más: "Le dediqué tantas horas a GH que acabó matándome. Tuve que dejar el programa para dedicarme a mí misma y recuperarme. Me ponía la chaqueta en la cara para que no me vieran llorar", llegó afirmar.

Pues bien, ahora es Lecturas la que se ha hecho eco. La catalana aparece en portada, dando más detalles de esta dura época que vivió que le hizo descender a los infiernos.

Empieza explicando por qué habría caído en esta pesadilla: por un desamor. Después de separarse del productor José Sámano, con quién vivió más de dos décadas, empezó una relación con el empresario Carlos Castillo, 16 años menor que ella. Estuvieron juntos durante cuatro años, pero un buen día decidió poner punto final: "Cuando se marchó yo había cumplido 50 años y entré en barrena. Las pastillas y la ayuda psicológica me ayudaron. El día que Carlos se marchó de casa y me dijo que no podíamos seguir porque no había futuro yo tenía de antemano diez días hasta la final de GH. Fue una liberación empezar el reality entonces, pero le dediqué tantas horas que acabó matándome. Aparentemente estaba normal, pero estaba en el infierno. Allí empezó una recuperación larga y horrorosa".

Clica en la imagen para ver cómo se despide de la audiencia / Telecinco

"No salía de casa. No podía levantarme de la cama ni paraba de llorar. Empecé a sentir cosas que nunca había sentido, aquellos miedos, aquellos horrores, aquel lloro de manera inesperada. Los médicos me dijeron que no podía seguir y era verdad. No podía. Y me fui a vivir con mi madre", añade. Un momento tan doloroso del que empezó a salir gracias a la química, la lectura, el yoga y la meditación.

Ahora, no puede estar más animada: "¡Estoy tan bien! Tengo muchas ganas de volver a televisión, de escuchar y de ayudar. Voy al psiquiatra para que me controle la medicación y me ha dicho que empiece a bajarla, pero no me fío. Me da miedo que aparezca de nuevo el monstruo. Notar la ansiedad, el horror, la angustia en la boca del estómago".

Asegura que la meditación es muy importante, afirmando que hablar con los muertos ayuda: "Hablo con los muertos todo el rato. Hablo con quien me da la gana, desde Shakespeare hasta mi padre. Y hago mucha meditación. Pasé una época muy dura y me ayudó mucho. Los muertos no hablan, sólo escuchan y te dan fuerzas y energía, lo que necesitas. Sobre todo cuándo has pasado una depresión y has conocido aquel agujero negro".

La Sexta

Mercedes Milá estuvo en el pozo, pero asegura contenta que está saliendo y tiene ganas de volver a dar guerra. Toda una declaración de intenciones que llega sólo un día después de que el presidente de La Sexta haya manifestado que le encantaría trabajar con ella. ¿La veremos en la cadena presentando un programa?