“Actuar se trata de engañar a la cámara”, una sabia frase que pronunció Michael Douglas frente al periodista Didier Allouch, pero que él mismo afirma le costó entender, por este motivo la carrera del hijo del talentoso Kirk Douglas tardó un poco en despegar, pero cuando lo hizo llegó hasta el máximo galardón posible para un actor dos veces, un Oscar por su papel en “Alguien voló sobre el nido del cuco”, y otro por su laureada interpretación como Gordon Gekko en “Wall Street”, un premio al cual el actor le otorga mucha importancia.
En el mundo de las artes o los deportes es muy común ver que los “dotes” del artista o deportista sean heredados por alguno de sus hijos, lo cual lo convierte automáticamente en el foco de los medios, ya que todos quieren saber si el hijo estará a la alturas de las expectativas del mundo, si será capaz de igualar a su padre, superarlo, o si vivirá toda la vida a su sombra.
Michael Douglas cumplió con las expectativas, considera haber superado a su padre
Vivir a la sombra de alguien más es algo que puede generar una fuerte carga psicológica. Las constantes expectativas o quizá decepciones por no ser “más” que alguien pueden generar verdadero daño psicológico a los hijos. Sin embargo, este no fue para nada el caso de Michael Douglas, quien se dejó la piel a lo largo de su carrera para ahora poder proclamar orgulloso no estar a la sombra de su padre.
Sus palabras parten de la última edición del Festival de Cannes, evento en el que se le otorgó el galardón de la Palma de Oro de Honor, momento que hizo a los asistentes romper en aplausos y ovaciones dirigidas al actor, quien no es ningún novato, sus más de cincuenta años en la industria se notan, y el nombre que se ha ganado no lo obtuvo de la noche a la mañana.
Michael Douglas es conocido por sus papeles en películas como “El síndrome de China” o “Instinto Básico”, esta última resultando bastante polémico por sus escenas subidas de tono junto a Sharon Stone, quien también pudo aprovechar bastante bien ese trampolín hacia una mayor fama. Pero volviendo al hijo de Kirk Douglas, por sobre todos sus trabajos resaltarán aquellos dos que le dieron los dos premios Oscar que puede presumir, y es esto lo que considera le ha dado la mano ganadora sobre la carrera de su padre.
Kirk Douglas, igualmente reconocido obtuvo solo un premio de la academia honorífico por toda su trayectoria profesional, un premio que no tiene nada que envidiar a un Oscar convencional pues no deja de ser la máxima meta en la carrera de cualquier actor, pero que ha sido superado por Michael Douglas en cuanto a cantidad, habiendo ganado no uno, sino dos galardones por sus destacadas interpretaciones. Por este motivo, el actor considera que el punto de inflexión en este sentido fue su papel en Wall Street.